El chupete previene la muerte súbita del lactante porque mejora el control cardíaco del recién nacido, según un estudio de científicos australianos que divulgó ayer la prensa local. El equipo de Horne centró su investigación en el impacto que tiene el chupón en la presión sanguínea y el ritmo cardíaco y para ello vigilaron durante varios días el sueño de 37 bebés de entre dos y cuatro semanas, dos y tres meses, y cinco y seis meses.