Victoria Camps piensa que en nuestras democracias no hemos encontrado el equilibrio entre libertad y convivencia. "Por una parte -afirma- la libertad es un gran valor pero por otra hay que construir un "demos", un pueblo cohesionado, con objetivos comunes que no favorezcan a una oligarquía en detrimento de los demás, y encontrar ese equilibrio es lo que falla".

¿Qué virtudes deberíamos hoy fomentar? Según la catedrática "el catecismo nombraba cuatro virtudes cardinales, que en el fondo son aristotélicas: la prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza. En esta crisis las cuatro han fallado, no se ha sido prudente, no se ha sido justo: hay quien dice que las grandes desigualdades, ese uno por ciento muy rico frente a una gran mayoría miserable, es una de las causas de la crisis, y estoy de acuerdo".

El buen ciudadano

En su recorrido por la historia de la ética llegó a Marx, que no solo critica la moral sino el Derecho "ya que para él son las clases dominantes quienes han elaborado este sistema de valores para su propio beneficio". Y llegó en ese trayecto a nuestro tiempo para afirmar que "hoy la ética va a cuestiones más concretas, a una forma distinta de entenderla y aplicarla a las preguntas más acuciantes. Esa "ética aplicada" se dirige a los problemas que surgen en disciplinas o actividades profesionales como la medicina, la investigación biomédica, la empresa, la banca, los medios de comunicación... ,Ya no se pregunta qué es ser buena persona, cosa que ya se nos escapa, sino qué es ser buen ciudadano, buen médico, buen periodista..."