El filósofo Gustavo Bueno es uno de los ocho autores, entre ellos el papa Benedicto XVI, del libro "Dios salve la razón" publicado en noviembre de 2008. En la tarde de ayer, en la sede de la fundación que lleva su nombre, reflexionó sobre la renuncia del Papa, que hoy se hará efectiva, barajó hipótesis y jugó con la idea de una pérdida de fe de Ratzinger a la luz de algunas insinuaciones. Incluso a causa de su libro de 2008.

-¿Qué le parece la renuncia de Benedicto XVI?

-Si le digo la verdad no me parece nada.

-¿Cómo?

-Lo que hago es enjuiciar.

-¿De qué manera?

-Según mi manía de clasificar creo que, de entrada, hay dos perspectivas. Una, general, emic, que coincide con la propia de los católicos creyentes, quienes se escandalizan porque un cardenal nombrado por inspiración del Espíritu Santo deje el cargo. Es algo que se está diciendo estos días por muchos sitios. Lo afirman los más críticos con la renuncia. El argumento vale si el papa mantiene la fe como si no la mantiene. Si la mantiene hace de menos al Espíritu Santo. Pero como el Espíritu Santo sabía, cuando lo eligió, que iba a renunciar, las cosas se complican. En una tertulia de Intereconomía oí eso hace unos días.Parece mentira.

-¿Y para quien no es creyente?

-Desde el punto de vista etic, desde fuera, por así decir, no hay dificultad: estaba cansado y lo deja. No hay misterio. Aún así puede verse como falta de justificación ante sus compañeros. Te elige un grupo y si lo dejas es una descortesía o una falta de lealtad. De todos modos si está enfermo la renuncia es natural.

-La disputa es intra eclesial.

-En la Iglesia unos dicen que es un héroe porque ha tenido la fortaleza de saltar por encima de las presiones e imponer su real debilidad. No quiere repetir lo que vio en su antecesor que no podía ni hablar. De ahí la renuncia. Es un héroe por eso. Otros, sin embargo, afirman que lo heroico habría sido seguir. De la cruz no se baja, aseguran. A mi juicio la teoría más interesante es la de un tal Yago de la Cierva, un profesor que estuvo organizando la JMJ en Madrid. Dijo que el papa lo dejaba porque se sentía sin fuerzas físicas y espirituales. Hablar de falta de fuerza espiritual equivale a perder la fe. Esa es la insinuación. Habría seguido en el cargo un tiempo por respetos humanos o por intereses personales ya que no tiene paro ni jubilación. Sobre la madre Teresa de Calcula se descubrió algo parecido en aquellas famosas cartas.

-A su juicio...

-La renuncia es insólita. Celestino V también lo dejó pero era solo un monje medio loco que andaba por ahí predicando. Se fue a los pocos meses. No vale como precedente. Ratzinger conoce la historia de la Iglesia, sabe que acaba de dar la gran campanada.La cosa es muy seria. Benedicto XVI, aun conociendo a fondo la historia de la Iglesia, cede ante la fatiga. ¿Cómo es posible? Quizá se va por razones estéticas para no dar la imagen del anterior papa, degragado, cayéndose, sin poder hablar. Quizá cree, y es así, que un papa en tales condiciones no es un papa.

-También se critican las riquezas del Vaticano y no por eso se van a liquidar.

-Desde la izquierda se dice que ya está bien, que a estas alturas el papa no debe vivir en un palacio. Debería dejarlo y darlo todo a los parados. Eso es ridículo. Si deja el Vaticano y se marcha al tercero izquierda de una casa de via Giulia se acaba la historia, deja de ser papa. No puede estar en una oficina. Es puro espiritualismo creer que puede gobernar a una población de mil doscientos millones de personas desde una oficina. Dejaría de ser papa porque un papa requiere una majestad determinada. Quienes hacen esas críticas son rusonianos con fantasías como descalificar la tiara y demás. Un protocolo mínimo es imprescindible.

-En todos los órdenes.

-Claro, cuando Felipe González era tribuno de la plebe iba a los mitines sin corbata y de pana. Al llegar a la Moncloa cambió radicalmente. En todo. No podía seguir así ni vivir en un palacio vestido de ese modo. En todo esto está la antropología metida de lleno. Es un tets muy bonito para medir los grados que calza cada cual. Quien hace críticas semejantes está calificado.

-Volviendo a la Iglesia.

-En la época de Pío XII estuve en Castell Gandolfo. Tenía un amigo teólogo que me metió por todos los vericuetos del palacio. Vimos una ceremonia del papa. Estaba repleto de gente. Todo perfectamente planeado. Primero, un anuncio con clarines. Después, un individuo dio unos gritos y la gente empezó a cantar. Todos estaban reunidos por naciones. El papa pasaba entre ellos como amansándolos. Como un faraón. Como un emperador romano. A fin de cuentas allí hubo un palacio imperial romano. Si hubiese salido de corbata y pana no habría ido nadie a verlo.

-¿Es verosímil una pérdida de la fe de un día para otro?

-No, tendría que venir de muy antes. El carácter intelectual del papa, su condición de teólogo, influiye. Aquel artículo a cuenta del discurso de Ratisbona que apareció en el libro conjunto "Dios salva la razón" lo planteé suponiendo que lo iba a leer. Decidí poner las cartas boca arriba. Dios no tiene nada que ver con la razón, indiqué. En la tradición escolástica, la razón es la capacidad de hacer silogismos.La razón es racional porque hace silogismos. No es un saber empírico. Ciencia es conclusión, según el famoso aforismo escolástico.Los principios no son ciencia sino intuitivos. Es la teoría de Aristóteles que recoge Euclides. Un triángulo es lo que se pinta.La ciencia empieza cuando coges un triángulo y un cuadrado y los encajas, como hacen los carpiteros, y de ahí sacas conclusiones. Dios no es racional. Lo puse así sabiendo que el papa lo iba a leer. Siempre le tuve respeto por sus encíclicas. Me apoyé en los escolásticos cuando dicen una y otra vez que Dios no es racional. No necesita a la razón.

-Adiós al libro, entonces.

-La razón silogística de Aristóteles es solo un aspecto de la razón. Lo racional está en función de las instituciones. Ese es el punto clave. El perro de San Basilio sigue a un conejo.Llega a un punto en que el camino se divide en tres. Olfatea un camino y nada; olfatea otro y nada y sin más se avalanza a correr por el tercero. Dicen que hace un silogismo disyuntivo. Es racional. De ahí la disputa del alma de los brutos en la que interviene Feijoo. Como no es sostenible los etólogos han llegado a un compromiso: no son racionales sino raciomorfos. Bueno, es lo mismo. El famoso chimpancé "Sultán" compone herramientas para alcanzar alimentos así que es raciomorfo aunque no racional. La diferencia entre hombres y animales no queda así establecida. Ni siquiera por el lenguaje. Una conducta racional es la que está institucionalizada y por eso se repite. Fuera de ahí, el delirio. La diferencia entre los hombres y los animales no es que los hombres de repente hayan dado el salto a la reflexión como dice el padre Teilhard de Chardin. O que un gen de pronto empiece a funcionar de determinada manera.La razón es un proceso histórico y cuando se establecen rutinas empieza a funcionar la conducta racional que es relativa a una sociedad determinada por eso hay formas diferentes de razón.

-¿Dios salva la razón?

-Decir que Dios es racional no tiene ni pies ni cabeza. Ojo, la razón silogística tiene averías y patologías como los sofismas. Pero la razón humana es otra cosa, enlaza con las instituciones.

-¿Cree que su libro influyó en una hipotética crisis de fe del Papa y a la renuncia?

-Ya me han dicho algo así. No tengo ninguna razón para creerlo o para dejarlo de creer. Parece ser que lo leyó. En uno de los artículos del libro Glucksmann hacía unos dibujos para quedar bien con todos sin plantear la cuestión de fondo como hice yo. No creo que mi artículo de 2008 le haya plenteado dudas de fe al papa, entodo caso habría ahondado en un propceso que vendría de más lejos. Como aquel chiste sobre Ruiz-Giménez cuando era embajador en el Vaticano. Estaba todo el tiempo rezando. Destacaron a un cadenal que le dijo: "señor embajaro, queremos saber si es usted sincero o está en el secreto". Era un chiste prohibido cuando yo estaba en Salamanca. Vamos que los cardenales sabían latín.