La pena de prisión iría acompañada de una severa prohibición de relacionarse con menores de edad tanto en el ámbito laboral como en el personal. Agustín O.G. se enfrenta a una petición del fiscal que, en la práctica y dada su edad, le inhabilitaría por el resto de su vida para impartir docencia.

En el escrito de acusación contra este presunto pederasta al que ha tenido acceso FARO, el fiscal reclama un total de 35 años de inhabilitación para el ejercicio del derecho de patria potestad, tutela, curatela y guarda de menores. Además, el acusado no podría desempeñar ningún cargo público o profesión relacionada con la docencia a menores de edad si finalmente termina condenado.

El documento que formaliza la acusación de la Fiscalía Provincial contra el docente de religión de 48 años de edad, consuma también el sobreseimiento provisional de la causa contra un menor de edad que había resultado sospechoso en la investigación de estos hechos. El fiscal resuelve que, según su criterio, "no ha quedado suficiente acreditado" que el citado menor hubiera participado en los delitos sexuales.