- En la situación en la que se encuentra España, este álbum es un canto al optimismo, ¿es un acto de rebeldía o una necesidad de Marlango?

- Realmente somos muy poco conscientes del trabajo que hacemos. No nos sentamos con un plan, hacemos el tipo de música que necesitamos hacer. En este caso, por necesidad y por oponernos a lo que está sucediendo, el cuerpo nos pedía hacer un disco en el que celebramos las cosas pequeñas que nos van sucediendo.

- El nuevo disco "Un día extraordinario" está grabado en español a diferencia de los cuatro anteriores que contaban con todas las letras en inglés, ¿cómo surge este cambio de registro?

- Es un proceso natural, un mar de fondo que teníamos desde la primera gira en la que tocábamos temas de Nacho Mastretta, entre otros, y notábamos que el público reaccionaba de forma distinta cuando cantábamos en su idioma. Hemos tardado lo que hemos tardado en escribir nuestras canciones en español. Le agradecemos a Fito Páez, que es un genio y muy generoso, el decirnos lo que necesitábamos oír. Ese "háganlo ahora, no es tan importante el cómo saldrá, porque lo que importa es disfrutar con la música, ver qué cosas nuevas salen", que nos dijo durante una cena en su casa en Buenos Aires, es el origen de este disco.

- Y sin embargo, el disco no es solo español en la letra sino también en la música.

- El disco está compuesto por esas cosas que aparecen cuando cambias el idioma. De repente la métrica cambia y el tempo cambia y aparecen otros ritmos, y te encuentras con algo de copla en el repertorio. Son ritmos que realmente ya habíamos explorado ya, como en la versión de "Semilla Negra" de Radio Futura. Les echamos a las canciones lo que creemos que les hace falta.

- ¿Cómo ha afectado a los directos esa transformación?

- No ha sido un volantazo o un cambio de dirección drástico, al igual que Alejandro toca la guitarra en lugar del piano en algunos temas, yo canto en español en lugar de en inglés. Pero sí que se nota sobre el escenario, sabes que todo el público te está entendiendo y cada uno se mete más en su mundo para escuchar su propia versión de la canción. Tocamos en una atmósfera mucho más intimista.

- Marlango ha evolucionado de lo que muchos consideraron un capricho de una actriz hasta convertirse en un proyecto consolidado...

- La verdad es que nos continúa ocurriendo lo que nos pasaba al principio: lo único en lo que se equivocan es en olvidarse de Alejandro y de Óscar. Se olvidan de la parte más importante de la banda. Pero cinco discos después, Marlango sigue siendo el capricho de Alejandro que es pianista, de Óscar que es trompetista y mío que soy cantante, pero actúo también. Es una necesidad, un lujo y un vicio.

- El videoclip del single "Lo que sueñas vuela" es también un cortometraje, ¿cómo se desarrolló esa idea?

- "Los sueños de Ulma" es el tráiler de la película que no existe. Queríamos hacer algo que no fuera un videoclip, y con Rómulo Aguillaume, que es un director maravilloso, trabajamos muchísimo, pero nos lo pasamos muy bien y estamos muy orgullosos. Es lo más cerca que estaremos de poder hacer un largometraje los juntos, que es algo que nos apetecía a los tres.

- "Los sueños de Ulma" ha sido también su estreno como directora, ¿la veremos pronto dirigiendo algo de más metraje?

- El trabajo de dirección me parece tan tan complicado que no me veo ahora mismo con la capacidad para hacerlo.

- Acaba de estrenar "Una pistola en cada mano" con Javier Cámara, Noriega o Luis Tosar, ¿cómo es la vida a caballo entre el cine y la música?

- Esta película de Cesc Gay es preciosa y yo la recomiendo, pero la grabé en mayo, justo al comienzo de la gira. El trabajo así puede llegar a ser muy compatible. Hay momentos de caos, una o dos semanas al año en las que coincide todo y no sabes qué hacer para llegar, pero en general es un trabajo precioso al que se puede llegar si te dejas ayudar.

- ¿Cuánto ha influido su trabajo como actriz en Marlango?

- No separo nunca una cosa de la otra, en los dos casos todo parte de contar una historia sea en música o en cine. Para mí son dos trabajos muy distintos, pero yo sigo siendo yo y hago las cosas como mejor puedo hacerlas. Una película no tiene nada que ver con un disco, ni el concierto con la película. No puedo separarlo y hablar de mí en tercera persona para dejar a Leonor la actriz en casa.

- El primer single se titula "Dame la razón", en Marlango ¿a quién hay que darle la razón?

- A Alejandro, sin duda, el es el jefe y normalmente tiene razón. Sin embargo, Marlango surgió de las versiones que tocábamos entre los dos, hasta que fueron apareciendo por necesidad las canciones nuestras. Ese fue el momento en el que llegó Óscar de Chicago y el grupo cobró verdadera forma. Por ello también, el proceso de cambio en este disco es algo que vivimos los dos juntos, Alejandro y yo funcionamos como un monstruo con dos cerebros y todas las canciones surgen de esa fusión.