La Fiscalía de Santiago de Compostela ha interpuesto una denuncia contra Marina Castaño, viuda de Camilo José Cela, y contra el exgerente de la fundación que lleva el nombre del premio Nobel de Literatura, Tomás Cavanna Benet, por un supuesto delito de malversación de caudales públicos, a raíz de una querella formulada por una vecina de Padrón (A Coruña), donde tiene su sede la entidad cultural.

La denuncia dirigida al Juzgado de Instrucción de Padrón y firmada el pasado 22 de junio por el fiscal Alvaro García Ortiz, a la que ha tenido acceso Europa Press, ve "base" para investigar también la posible comisión de delitos de estafa, apropiación indebida y otros, como fraude fiscal, por el desvío a una sociedad privada de las devoluciones del IVA de la Fundación Cela, que está exenta de tributación, así como por cargar a esta entidad cultural gastos privados.

La denuncia de la vecina de Padrón María Dolores Ramos García por supuesta estafa contra Marina Castaño y Tomás Cavanna detalla que la sociedad Lengua y Literatura AIE fue constituida con un 80 por ciento de capital inicial por la Fundación Cela, mientras que el 20 por ciento restante fue aportado por Marina Castaño a través de la sociedad Letra y Tinta, que dirige desde su domicilio de Madrid.

La sociedad Lengua y Literatura AIE empezó a gestionar las subvenciones de la Fundación Cela y, a su vez, empezó a pagar las facturas de la entidad cultural, de forma que habría obtenido "grandes cantidades de dinero en concepto de devolución del IVA". Fiscalía sostiene, a raíz de sus investigaciones, que Lengua y Literatura AIE "pudiera encubrir devoluciones de IVA" y tener la finalidad de cargar los gastos de la fundación, de forma que actuaría como una sociedad interpuesta.

Gastos de personal

Además, la denunciante alerta de que varios empleados que figuraban como trabajadores de la Fundación Cela, que abonaba sus salarios, "en realidad prestaban sus servicios en actividades privadas del matrimonio Cela".

Al respecto, Fiscalía considera como hechos que el empleo de subvenciones de la Fundación Cela para contratar personal "era una práctica habitual en la denunciada --Marina Castaño-- desde hace algunos años" y que "se ha mantenido en la actualidad".

Así, relata el caso de un empleado "contratado con dinero público" por la Fundación Cela que, sin embargo, ejercía su trabajo "en el ámbito privado" en Madrid, en el domicilio de Marina Castaño.

La Fiscalía solicitó documentación tanto del uso de los fondos de la Fundación Cela como del empleo de sociedades interpuestas para administrarla a la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional, a la Agencia Tributaria y a la Tesorería General de la Seguridad Social.

Diligencias

A la vista de la documentación recabada y de las pruebas realizadas, para la Fiscalía quedan "al menos en inicio, acreditados parte de los hechos denunciados", por lo que propone judicializar las diligencias. El fiscal Alvaro García Ortiz plantea una serie de diligencias para aclarar, por ejemplo, una operación con valores por la sociedad Lengua y Literatura AIE por importe de 1,2 millones de euros y que se tome declaración "en calidad de imputados" tanto a Marina Castaño como a Tomás Cavanna.

La difícil situación de las cuentas de la Fundación Cela llevó a la Xunta a rescatarla, de forma que ha pasado a tener carácter público desde el pasado mes de abril. El conselleiro de Cultura, Jesús Vázquez, sustituyó como presidente del patronato a la viuda del escritor, que no obstante continúa como presidenta de honor.