El presidente de Farmaindustria, Jordi Ramentol, anunció ayer que el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad va a proponer en el próximo Consejo Interterritorial que se celebrará el miércoles 27 de junio la desfinanciación de determinados grupos de medicamentos, una medida que este sector confía en que afecte a los fármacos para síntomas leves. "Esperamos que esta desfinanciación llegue lo antes posible", aseguró tras la asamblea general ordinaria de la patronal.

La propuesta de Farmaindustria pasa por dejar de financiar los medicamentos para síntomas menores, tales como laxantes, mucolíticos, lágrimas artificiales, antihemorroidales o algunos antiinfecciosos. En total, nueve grupos terapéuticos que podrían hacer ahorrar al Estado unos 500 millones de euros anuales. "Creemos que los medicamentos de síntomas leves o menores son desfinanciables dadas las circunstancias, porque en algún sitio hay que ahorrar", precisó Ramentol.

Además, solicitó al Gobierno central que "gire el foco de su política" y priorice el crecimiento y el desarrollo de industrias "de futuro y más competitivas" como esta, que sin embargo ha sufrido una caída de ingresos que ascenderá al 35% como consecuencia de un conjunto de medidas adoptadas en los últimos años para reducir del gasto farmacéutico hasta niveles de 2002. De igual modo, la innovación bajó en 2011 entre un 4 y 5% y este año lo hará "bastante más", ya que "cuando las compañías ven lastradas sus cuentas de resultados lo que hacen es optimizar la estructura de personal y ajustar los gastos de innovación".

"El sector farmacéutico tiene mucho potencial y es de los pocos que puede tirar del país", avanzó Ramentol, recordando que en este momento están exportando unos 10.000 millones de euros que podrían "incluso doblar" si contaran con un marco estable para trabajar. "Para ello hay que sentarse y hacer un plan, con medidas concretas, para ayudar a construir una economía más sostenible para el país. Lo que reclamamos es que es bueno para el país que haya una industria farmacéutica nacional y que si vamos a un sistema que se va poco a poco desustanciando a estas empresas, llegará un momento que no tendrán capacidad financiera y estaremos en manos de la dispensación por parte de países que realmente pueden dispensar productos a precios más bajos", aseguró Ramentol.

Por otro lado, el máximo responsable de Farmaindustria aseguró que, pese al plan de pago a proveedores impulsado por el Gobierno, "sigue habiendo un problema grave de pago" con las comunidades, ya que muchas de ellas –sin querer dar nombres– no han pagado nada en lo que va de año.

"Hay comunidades que sí están al día pero otras que prácticamente no han pagado nada desde el 1 de enero", reconoció, y admitió que el problema de la deuda es consecuencia de una "falta de equilibrio entre lo presupuestado y el gasto real". Pese a ello, agradece al Gobierno el plan de pago de la deuda histórica, ya que ha sido "providencial" para el sector. "Muchas compañías se encontraban en una situación financiera muy difícil, porque por un lado la deuda era muy alta y porque los bancos no querían dar créditos para financiarla", admitió.

Código de identificación para el copago

Los 44 millones de usuarios del Sistema Nacional de Salud cuentan ya con un código identificativo que revela qué cantidad proporcional del coste de los medicamentos tendrán que abonar en función de su renta a partir del 1 de julio, fecha en la que comenzará a aplicarse el nuevo "copago" farmacéutico. Así lo anunció ayer la secretaria general de Sanidad, Pilar Farjas, quien dijo que su departamento "ha hecho los deberes" para que todo esté listo en el momento de aplicar una medida que, por primera vez, afecta a los pensionistas. Sobre los pacientes polimedicados, añadió que podrían exceder el tope de copago establecido para los jubilados, de entre 8 y 18 euros al mes, un colectivo que el PSOE entiende que es suceptible abandonar su tratamiento por no adelantar una cuantía importante. Se fijará además el mecanismo para que "cada 2 o 3 meses" –el límite eran 6– se haga el reembolso mediante trasferencia a la cuenta del pensionista.

Sin preservativos en la campaña contra el sida para ahorrar 9.000 euros

Para ahorrar 9.000 euros, Sanidad ha decidido no incluir el reparto de preservativos y lubricantes junto con el folleto de la última campaña para la prevención del VIH y otras infecciones de transmisión sexual en "Hombres que tienen sexo con hombres" (HSH), que es lo que cuesta ambos productos. Fuentes de Sanidad informaron que, en ningún caso, desde el ministerio que dirige Ana Mato se ha puesto ningún inconveniente a que dichos folletos vayan acompañados de medidas de prevención. Sin embargo se ha decido no asumir el "alto coste" que suponía su empaquetamiento, ya que se duplica el gasto.

"Estamos en tiempo de maximizar la eficiencia y se puede dar el mismo producto, el folleto y el preservativo, pero por separado. Tenía un coste perfectamente eleminable ahora que los gastos se tienen que mirar con cuidado", explican desde el ministerio, en respuesta a la denuncia este martes de colectivos de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales (LGTB), quienes afirmaban que se había decidido "eliminar" su reparto y anunciaban que no trabajarán con el Plan Nacional sobre el Sida (PNS).

Para dicha campaña, que lleva unos días en marcha, se han realizado folletos informativos que han sido enviados a los canales de distribución habitual y que, en opinión del ministerio, puede seguir siendo acompañado por los 100.000 preservativos y 100.000 lubricantes donados.