El sordomudo vigués Gerardo Fernández retorna a Roncesvalles, de donde partió en 2009 rumbo a Compostela. Sus problemas de equilibrio no le impidieron entonces realizar su hazaña, que culminó con la ayuda clave de su entrenador, el policía local de Vigo Javier Pitillas. Ahora, los dos vuelven a ese simbólico punto de partida para acompañar a un nuevo amigo: Antonio, un niño cordobés de 13 años con parálisis cerebral, en una iniciativa que se llama Discamino 2012.

Antonio "no anda, no habla y no se puede manejar solo, pero entiende y conoce a las personas", explica su padre, Javier Luque, en el blog discamino.redestable.com, que han creado para relatar su experiencia. Toda la familia apoya que este pequeño andaluz recorra la vía jacobea este verano en una bicicleta especial comprada en Holanda en la que pedalea su progenitor. Tres son los objetivos: contribuir a la rehabilitación de Antonio mediante estimulación y haciéndole disfruta de la vida; integrar la bicicleta como actividad en el ocio familiar y demostrar a la sociedad que personas en similares circunstancias también pueden afrontar el reto si tienen "ilusión".

Ya se han comenzado a recoger frutos. Su hermana es consciente de la magia que le invade solo con preparar el proyecto. "El otro día la logopeda comentaba que (Antonio) dijo ´no´ por primera vez", apunta la niña a la cámara con una sonrisa, en un vídeo en la bitácora http://discamino.redestable.com.

Para Gerardo, la aventura del próximo verano será su tercer Camino de Santiago o Camino de los Sentidos. Para Antonio, será el segundo. El primero lo hizo en el año 2004 desde Tui a Santiago, más de 100 kilómetros frente a los 800 entre Roncesvalles y Compostela que le esperan.

En esta ocasión, se alojará en albergues, alojamientos de las asociacines de parálisis cerebral y hoteles de la Red Española de Turismo Accesible. Pedalearán por la mañana para dedicar el resto del día a descansar y conocer los lugares.

Un policía vigués, de guía

En este periplo, Javier Luque reconoce que tendrán a un "guía de lujo, Javier Pitillas, que aporta los conocimientos exactos de logística e infraestructuras durante el Camino que ha recorrido en varias ocasiones".

Pero la labor de Pitillas va más allá. Junto a Javier Luque, ha iniciado una recaudación de fondos. La mitad se destinará a la Asociación Cordobesa de Parálisis Cerebral; el otro 50% a Aspavi, Asociación de Padres de Personas con Parálisis Cerebral. En el caso del colectivo cordobés, se aspira a reunir el suficiente dinero para adquirir una bicicleta Duet, especializada e igual que la que llevará Antonio en su peregrinación. Lo que se busca con este vehículo es que otros niños como Antonio tengan la posibilidad de disfrutar de una bicicleta adaptada con la que salir a pasear con su familia, independientemente de la parálisis que sufren (en el caso de Antonio asciende al 85%).

Por parte viguesa, Aspavi invertirá la cuantía en una máquina Perkins de escritura en braille así como una impresora en braille. El olívico Javier Pitillas informa puntualmente de cada avance. Desde el blog nuncaserabastante.blogspot.com, detalla la forma peculiar que han ideado para recaudar fondos. Esta se basa en la adquisición virtual de porciones del Camino.

Las personas que deseen colaborar pueden adquirir un kilómetro por el precio de cinco euros; mientras que los monumentos y lugares especiales se cotizan a 25 euros, y las catedrales y lugares principales a 50. El dinero puede ingresarse en la cuenta de Novagalicia Banco 2080 5141 35 3040009409 apuntando "Para discamino".