Aunque en Galicia, y el resto de España, es una novedad, con nombre inglés incluido ya que se ha optado por el vocablo anglosajón, el coaching lleva años dando resultados en Estados Unidos, Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda. Se trata de gestionar mejor los equipos y el talento de una empresa (o la comunicación de un político, por ejemplo) para que sea más eficaz, eliminando los limbos improductivos que existen en muchas compañías. ¿El reto? Que la cadena funcione mejor, ser más eficaz y, en definitiva, mejorar la facturación. En Europa, se ha convertido en habitual en Alemania y en Francia, que lo usan hasta para ayudar a hacer la tesis a los doctorandos.

Aunque todavía no es común en la comunidad escuchar a un empresario decir "necesito urgentemente un coach, tengo un problema difícil", esta técnica ha ido penetrando tímidamente en los últimos tres años de modo que las primeras empresas que la han probado ya pueden hablar de resultados positivos en sus números. Son más de 40 las firmas gallegas que utilizan en la actualidad el coaching para mejorar su estrategia o arreglar nichos productivos que frenan su crecimiento. Son empresas relacionadas con las nuevas tecnologías (TICs), tanto grandes como pequeñas, fabricación en planta, conservas, construcción, servicios y franquicias de tiendas, distribuidas a partes iguales entre Vigo, Santiago y A Coruña y solo tres en Ourense. Así lo describe Daniel Álvarez, el primero en introducir en Galicia el coaching hace ahora cinco años y con compañía propia: QCoach Desarrollo Directivo. Todavía son pocos los coaches, centrados en exclusiva en gestión de talento partiendo de las experiencias de los países anglosajones. De hecho, no existe una carrera que permita sacarse un título oficial de coach and trainer.

Como corriente novedosa, todavía no existen estadísticas oficiales sobre la actividad de los coaches en Galicia. De hecho, funciona más por el boca a boca y lanzarse a esta aventura de contratar un gestor depende básicamente de la sensibilidad de la dirección de una empresa por innovar y fomentar el talento en su equipo. "Calculamos que un 5% de las pymes y un 40% de compañías grandes de Galicia utilizarán el coaching", indica Daniel Álvarez, a modo de previsión.

¿Un ejemplo de éxito empresarial a través de esta técnica? "Una empresa de seis trabajadores. El empresario trabajó su capacidad de dirección de personas. El resultado fue que delegó gran parte de su trabajo para dedicarse a lo que más aportaba: conseguir negocio. Ahora necesita estar poco tiempo en la oficina y cuando está es para informar y ser informado, lo que facilita el trabajo de todos y les permite innovar. La plantilla también lo agradece y mejora el clima", cuenta Álvarez, quien asegura que en época de crisis el coaching es más que apropiado, para redirigir equipos a veces con menos gente. Como curiosidad, en el Reino Unido el 90% de las compañías con más de 2.000 empleados utilizan coaches y, en las medianas, ya asciende al 70% de las firmas con más de 200 trabajadores.