El festival Son de Vigo llegó a su fin la pasada noche en el auditorio de Castrelos con cuatro pesos pesados de la escena musical gallega: Ragdog, Miguel Costas, Eladio y los Seres Queridos e Iván Ferreiro. Y lo hizo ante un público bastante más escaso que lo acostumbrado en Castrelos, cuyas gradas ni siquiera se llenaron.

Con un redoble de tambores, Manuel Manquiña salió a presentar el evento para unírsele poco después el que fue maestro de ceremonias de todo el festival, Tony Lomba.

Con una voz que parecía venida de ultratumba como inicio, los primeros en subir al escenario fueron Ragdog, los más jóvenes de todos los protagonistas de la noche. Contentos de estar de nuevo en casa, durante el concierto lo que más sonaron fueron los temas de su último disco "Bichos raros" que salió a la venta el pasado mayo y en el que el sonido es mucho más electrónico que en sus inicios, pero también tocaron canciones de su anterior, y primer, disco "Nada más". Títulos como "Huracán", "Siberia", "¿Dónde estabas?", "O sin dirección" hicieron vibrar al público vigués.

Aunque se formaron en el año 2002, dieron el salto a nivel nacional hace tan solo 3 años y desde entonces no han parado de cosechar éxitos. Su fórmula quizás sea la energía que derrochan sobre el escenario, sin para de moverse en todo el concierto. El vocalista, teclista y guitarrista, el hombre todoterreno del grupo, Alex Lores, transmitió al público mensajes continuamente entre canción y canción sin parar de moverse por el escenario. El colofón final de la actuación fue el tema "Tú y yo", uno de los más aclamados por el público que lo coreó visiblemente emocionado y que terminó con cañones de confeti.

Cuando los cuatro componentes de Ragdog se bajaron del escenario le tocó el turno al más rockero de la noche: Miguel Costas. Ex Siniestro Total, ex Aerolíneas Federales, ex Los Felices... su carrera musical es amplia así como su experiencia sobre los escenarios. El cantante presentó su último disco "Costas is back", un álbum que repasa sus mejores éxitos, junto a los músicos que le han acompañado en su anterior gira: Little Naya con la guitarra, Coché Vil al bajo y Bojan en la batería.

Costas demostró en este concierto que los años no pasan para él. Tan en forma como el primer día, allá por los años 80 cuanto cantaba "Matar jipis en las Cíes" junto al resto de los miembros de Siniestro Total. En Castrelos presentó o más bien deberíamos decir que volvió a presentar clásicos como "Yo estoy bien, tu estás gordo" o "No me beses en los labios", demostrando que todavía le queda mucha guerra por dar sobre los escenarios. Durante la actuación del veterano cantante, la afluencia del público fue mayor.

Después de Costas le tocó el turno a los terceros protagonistas de la noche: Eladio y los Seres Queridos. Se subieron al escenario de Castrelos con las canciones de "Están ustedes unidos", su último disco, que además da título a uno de los temas que mejor suenan en directo. Su estilo no es otro que un pop personal y tranquilo a pesar de que tienen una capa de electrónica, con lo que consiguen dar fondo y textura a sus temas.

Así, Eladio Santos y su grupo hicieron bailar a todo el auditorio con sus ritmos pegadizos.

El siguiente, y último, en subirse al escenario fue Iván Ferreiro. Era la primera vez que se subía al escenario de Castrelos, sólo lo había hecho en el año 2008 para cantar una canción junto a Pereza, por lo que está acostumbrado en su ciudad natal a tocar en escenarios más pequeños. Aún así el exvocalista de Los Piratas no defraudó a la gente que se concentró anoche en el auditorio. Con 4 discos en solitario a sus espaldas, el cantante hizo un repaso por todos ellos, además de tocar alguno de los temas más conocidos del repertorio de su antiguo grupo.