La Asociación de Escritoras e Escritores en Lingua Galega (AELG) entregó ayer en una cena –con una asistencia superior a las 80 personas– los premios de la organización a los mejores libros y autores del pasado año. Manuel Rivas con Todo é silencio logró el premio a la mejor novela; mientras que Marcos Calveiro consiguió el galardón a mejor obra de literatura infantil-juvenil por el título O pintor do sombreiro de malvas.

En cuanto al ensayo, María Pilar García Negro consiguió el premio por su trabajo O clamor da rebeldía. Rosalía de Castro: ensaio e feminismo.

En teatro, Manuel Lourenzo se hizo con el galardón por su pieza Flores de Dunsinane. En esta ocasión, Ana Romaní consiguió la mayor distinción en poesía en gallego por su poemario Estremas. Finalmente, el premio a mejor blog literario se lo llevó O levantador de minas de Alfredo Ferreiro; y en Ramón Nicolás recayó el galardón de mejor trayectoria de periodismo cultural.

Más allá de estas categorías, la asamblea de socios de la AELG –no hay que olvidar que estos premios son votados por los integrantes de la agrupación, escritores– decidió que la Fundación Penzol (con sede en Vigo y que hasta el pasado año dirigía el fallecido Paco del Riego) debía llevarse el premio Institución Cultural por "su contribución a la divulgación de la literatura gallega".

Como ya estaba previsto, Antonio Gamoneda recogió el galardón a Escritor Galego Universal, distinguiéndolo por su "excelencia literaria con el compromiso ético" además de su "defensa de la dignidad humana".