En el edificio que durante años acogió la vida de los ancestros de la familia Güell (los grandes mecenas del arquitecto Gaudí), en el número 35-37 de la Rambla de Barcelona, pervive el Centro Galego. Entre sus actividades culturales, un grupo de teatro, de nombre Os Furafollas. Su último proyecto, una lectura dramatizada de la obra "Memoria do incendio", texto ganador del XIII Premio de Teatro Josep Robrenyo, uno de los más destacados de la escena catalana y que este año recayó en Vanesa Sotelo (Cangas, 1981), quien recogió el galardón el pasado día 21 en la ciudad condal.
El premio –dotado con 3.000 euros– se lo entregó Gloria Montero, presidenta de la Asociación de Investigación y Experimentación Teatral (AIET), a la actriz y directora Vanesa Sotelo, quien agradeció al jurado "el reconocimiento lingüístico a una obra escrita en gallego" en un momento en el que esta lengua "casi está puesta en cuestión". Del medio centenar de obras que concurrían, "Memoria do incendio" fue la única presentada en gallego.
"Memoria do incendio", según su autora, nace en su viaje a Praga, donde prendió en ella la historia de inmolación de Jan Palach y Jan Zajíc, dos estudiantes que a finales de los sesenta se quemaron como protesta contra la invasión de Checoslovaquia a cargo de los estados del pacto de Varsovia.
