"Ruth M. Anderson. Una mirada de antaño", que se inaugura esta tarde en la sede coruñesa de la Fundación Caixa Galicia, constituye un documento histórico excepcional. Un total de 439 imágenes, tomadas por la fotógrafa y etnóloga norteamericana Ruth Mathilda Anderson para la Hispanic Society of America entre los años 1924 y 1926 en los dos viajes que realizó a la comunidad, conforman esta muestra, comisariada por Miguel Anxo Seixas Seoane y Patrick Lenaghan, que trabajaron durante cinco años en la sede neoyorquina de esta sociedad centenaria de estudios sobre España revisando y seleccionando el trabajo de Anderson.

Seixas asegura que Anderson fue una mujer "apasionada por Galicia", que aprendió a hablar gallego y que incluso tradujo al inglés los versos de Rosalía de Castro y de Eduardo Pondal.

Ruth M. Anderson no sólo fotografió las costumbres y los monumentos gallegos, sino que documentó cada imagen con datos objetivos pero también con comentarios personales que hoy constituyen una importante fuente de información sobre la Galicia de la década de los años veinte y sobre el proyecto mismo de la Hispanic Society.

"Llevar el pescado a Cangas es como llevar carbón a Newcastle –apunta en una de las imágenes–, pero algunas de estas mujeres vienen desde Vigo con los cestos llenos". "Casa de pescadores. Los balcones tienen uso doméstico, mientras que en el bajo se guardan las gamelas, negras y azules", anota sobre otra. En otras ocasiones escribe datos como el precio del pollo –5 pesetas– o la jornada de los canteros –"trabajan desde las 7 am hasta las 7 pm, con descansos para el desayuno a las 9 am y después dos horas para comer al mediodía", describe–.

Ruth M. Anderson plasmó con su cámara las profesiones y oficios de la época, a los habitantes de la ciudad y del rural, del interior y de la costa, fotografío fiestas como la de San Roque en Vigo, la de San Lázaro en Ourense y el Corpus Christi, captó a través de su objetivo las casas de los pescadores de O Berbés, la Ría de Vigo desde una de las ventanas del Hotel Moderno, los castros de Santa Trega, un día de mercado en Pontevedra, la feria de ganado en Vigo, los hórreos, los pazos, las casas labregas, los ritos religiosos...

En su periplo por tierras gallegas, la fotógrafa y etnóloga fue testigo también de los cambios urbanísticos y sociales que se estaban gestando y que han quedado plasmados en blanco y negro para la posteriodad, como el incipiente proceso privatizador de la tierra, con el surgimiento de la agricultura del minifundio, y el crecimiento de municipios y urbes, reflejado en nuevas construcciones como el Teatro de García Barbón y la Virgen de la Roca de Baiona, proyectos ambos de Antonio Palacios.

"Ruth M. Anderson. Una mirada de antaño" es una visión de una Galicia para muchos inédita y un apasionante viaje al pasado a través de la mirada de una etnóloga norteamericana que enseguida confesó su pasión por una tierra llena de contrastes. Además de las fotografías que conforman esta exposición, el catálogo editado por la Fundación Caixa Galicia aporta sus anotaciones y los diarios del padre de Anderson, donde relata los detalles del viaje y los problemas a los que se enfrentaron. A través de éstos se puede reconstruir este periplo casi día a día y saber en qué condiciones realizaron su trabajo.