La prevención como mejor arma para luchar contra el cáncer de mama. Con esta idea se celebró ayer el Día Internacional de esta enfermedad, que afecta a 35 de cada 100.000 mujeres en la provincia de Pontevedra y que cada año suma cerca de 300 nuevos casos en el área sanitaria de Vigo.

La edad en la que se produce una mayor incidencia de tumores comprende entre los 50 y los 65 años, según reconoce el especialista Gonzalo de Castro, cirujano y doctor de la Unidad de Senología del Hospital Xeral-Cíes de Vigo. "Por debajo de estas edades la incidencia es mucho menor, aunque empiezan a ser preocupantes los casos de mujeres menores de 40 que padecen este tipo de cáncer", afirma.

Así, las trece unidades del Programa Gallego de Detección Precoz del Cáncer de Mama, dependiente de la Consellería de Sanidade, exploraron desde el 1 de enero hasta hoy un total de 90.894 mujeres de 50 a 68 años. A Coruña es la provincia con mayor número de examinadas (38.786 pacientes), seguida de Pontevedra (31.511), Ourense (11.629) y Lugo (8.968). En la mayor parte de los casos los resultados de las mamografías no presentaron lesiones sospechosas, según indicó ayer Sanidade. Tan solo el 2,07 por ciento de los casos (1.849) fueron remitidos a unidades de diagnóstico para la realización de pruebas complementarias.

Galicia se unió ayer a la celebración del Día Internacional contra el Cáncer de Mama con la instalación de mesas informativas en las principales ciudades, donde los afectados repartieron lazos rosas –como identificación de este día–, folletos informativos sobre la enfermedad y su prevención y regalos relacionados con esta patología.

Desigualdad

Aunque siempre se ha asociado el cáncer de mama a las mujeres, en los últimos años se ha visto incrementado el número de hombres que padecen esta enfermedad. "Cada vez hay más concienciación, pero los varones afectados se quejan de que no cuentan con el mismo apoyo desde el punto de vista sanitario", asegura Gonzalo de Castro, quien señala la incidencia en un 0,7 por ciento en la población masculina porque cuentan con menor cantidad de tejido mamario. En los últimos 30 años se diagnosticaron 35 casos y en 2008 fueron operados siete pacientes.

Por su experiencia, los hombres asumen peor esta enfermedad. "Siempre pensaron que era una dolencia exclusiva de mujeres y cuando le comunicas la noticia al principio no se la creen", declara. "Este cáncer es igual al de la mujer, por eso la predisposición genética también influye. Si hay algún caso familiar, los varones también deben vigilar su cuerpo", añade.