El sistema TDT (Televisión Digital Terrestre), que será el único de distribución de la señal vía terrestre a partir de abril de 2010, cuando se produzca el denominado “apagón analógico”, podrá tener canales de pago, según anunció ayer la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.

El Consejo de Ministros aprobó ayer un Real Decreto Ley mediante el cual los operadores que deseen un canal de pago sólo tendrán que solicitarlo, lo que servirá, según la ministra, para “establecer la igualdad de condiciones” en el sector audiovisual.

Con la TDT de pago, en palabras de la vicepresidenta, “se abren nuevas vías de financiación para las televisiones y también nuevas posibilidades y opciones para los telespectadores que, en todo caso, contarán con una gran oferta en abierto”. Por eso, calificó la regulación de “urgente y necesaria”.

La medida, aprobada a través de Real Decreto Ley, podrá entrar en vigor a partir de su publicación en el BOE, a la espera de la ratificación del congreso. Así, cada concesionario de una licencia de ámbito estatal podrá ofrecer el acceso condicional a través de uno de sus canales de TDT.

De la Vega negó que la aprobación antes de la puesta en marcha de la Ley General audiovisual responda a la proximidad del inicio a finales de agosto de la Liga de fútbol. Según matizó, “es verdad que la TDT de pago está contemplada en la nueva ley del sector, que establecerá el marco normativo final, pero mientras se tramita, era conveniente adelantarla por cuestiones técnicas y económicas”.

Crisis en las privadas

Respecto a los operadores de televisión privada, apunta que la TDT de pago será “una vía alternativa de ingresos” pues, según apuntó, la crisis está afectando a las empresas de televisión en pleno proceso de transición, lo que puede poner en riesgo su servicio.

Haciendo referencia a determinados contenidos como los de alta definición, con un coste elevado, señaló que no tendrían viabilidad económica si no es mediante la TDT de pago. “Estos productos van a ser cada vez más comunes en todos los países de nuestro entorno y sin la TDT de pago los operadores españoles y los consumidores quedarán en inferioridad de condiciones respecto a otros países”, comentó De la Vega.

Por último, la normativa va a establecer que los descodificadores se basen en un estándar tecnológico abierto, de forma que cualquier aparato pueda servir para descodificar la señal de pago de todos los operadores. Así, si por ejemplo las cadenas de televisión optan por ofrecer tarjetas insertables en descodificadores, éstos podrán leer todas las tarjetas.