El escritor José María Merino (A Coruña, 1941) ingresa el domingo en la Real Academia Española y, aunque está convencido de que los filólogos son los más útiles en esta institución, espera poder aportar “la visión diferente del lenguaje” que tienen los escritores y esa “resonancia poética” que saben ver en las palabras.

“Los escritores son un poco francotiradores en la Academia”, afirma Merino a la vez que manifiesta la ilusión que le hace ser académico, si bien el trabajar para una institución de tanto prestigio le crea “una cierta responsabilidad” y “una cierta desazón muy placentera”.

Pertenecer a la RAE “nunca fue una meta” para él, pero “ha resultado una culminación” en la trayectoria de este gran maestro del cuento en castellano; “uno de esos regalos que te hace la vida”. En su discurso explicará “cómo nace en la imaginación de un escritor” una ficción.