Según publica hoy el diario "Bild", Kathrin dio a luz a su bebé en la madrugada del lunes al martes en un hospital de Bergisch Gladbach (oeste de Alemania).

La niña pesó 2,9 kilogramos y midió 49 centímetros.

"La pequeña es increíblemente bonita", indicó al rotativo la madre, quien restó importancia a las dificultades del alumbramiento, que duró más de doce horas, y afirmó que esperaba que los dolores del parto fueran "mucho peores".

El padre de la criatura estuvo presente durante el parto, tomó la mano a su novia e incluso cortó el cordón umbilical de su hija, como documenta "Bild" en las imágenes que acompañan la noticia.

Kathrin y su hija se trasladarán en breve a un residencia para madres e hijos puesto que los padres de la joven no pueden ayudarla a criar al bebé "por motivos de salud".

Martin Rölen, portavoz municipal de Bergisch Gladbach, explica que posiblemente se nombre un tutor para Selina puesto que su madre sólo podrá tomar decisiones importantes relativas a su hija una vez alcance la mayoría de edad, que en Alemania es a los 18 años.

Christian sólo podrá ver a su hija una vez a la semana, de acuerdo con la normativa de visitas establecida por la residencia.

"¿Cómo voy a asumir mi responsabilidad si sólo puedo ver a Selina tan poco? Quiero estar ahí para mi hija y apoyar a Kathrin. Pero lo vamos a conseguir. Creemos firmemente en ello", sostuvo el joven.