El Gobierno ha autorizado la TDT de pago y a partir de hoy los operadores de televisión privados de ámbito nacional podrán solicitar al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio la modificación de sus concesiones para poder prestar este servicio.

La autorización del Ejecutivo para otorgar estas concesiones requerirá un informe previo preceptivo del Consejo de Estado y su posterior aprobación por el Consejo de Ministros. Además, todos los agentes implicados en esta nueva modalidad de televisión digital --operadores de televisión, operadores de red, fabricantes, entre otros-- deberán someterse a lo establecido en el artículo 24 del Reglamento de mercados.

Este apartado establece, entre otras cosas, obligaciones que garanticen la existencia de decodificadores que sean compatibles con distintos mecanismos de cifrado, con el objetivo de facilitar que los ciudadanos puedan acceder a todos los canales de pago mediante un único decodificador. Además, estos aparatos deberán contener los mecanismos necesarios para el control de los contenidos protegidos.

El Gobierno considera que la TDT de pago traerá "importantes beneficios", tanto para los ciudadanos, como para los operadores privados de televisión y para la industria fabricante de equipos para la televisión de pago. "Los ciudadanos podrán acceder a contenidos de mayor calidad, estimulando de este modo la transición a la TDT" señaló en un comunicado. Asimismo, entiende que la puesta en marcha de este acceso condicional "no va a suponer merma alguna en cuanto al acceso en abierto a los acontecimientos deportivos de interés general".

En este sentido, recordó que seguirá siendo de aplicación la Ley reguladora de las emisiones de acontecimientos deportivos, que establece la obligación de retransmitir en directo y en abierto un partido de cada jornada de la liga de fútbol de primera división. Asimismo, se retransmitirán en abierto los eventos deportivos que cada año se definan como de interés general.

Por otra parte, el Gobierno destacó que los operadores de televisión podrán acceder a una fuente adicional de financiación, además de la publicidad, lo que puede redundar en un mayor uso del estándar de televisión de alta definición.

Con esta decisión, España se une al amplio grupo de países en los que ya se permite a los operadores de televisión la prestación del servicio de TDT de pago, entre los que destacan Francia, Reino Unido, Italia, Portugal, Países Bajos, Suecia o Finlandia.