Uno de ellos entró en el tribunal en silla de ruedas tras un intento de suicidio.

De los 294.000 niños afectados, según cifras oficiales, seis murieron por insuficiencia renal como consecuencia de la ingesta de leche adulterada con melamina, un químico tóxico que eleva los niveles de proteínas de la leche en los controles de calidad.

El Tribunal Popular Intermedio de Shijiazhuang (capital de la provincia nororiental de Hebei, colindante con Pekín) acusó a la ex presidenta y directora general de Sanlu, Tian Wenhua, y a los otros cuatro ejecutivos de producir y vender productos lácteos falsos que incumplían las normas de seguridad alimentaria.

Los otros tres acusados son los ex directores generales Wang Yuliang y Hang Zhiqi, y el antiguo responsable de la división láctea de Sanlu Wu Jusheng.

Wang Yuliang se personó en el tribunal en silla de ruedas después de haber perdido movilidad en un intento de suicidio, informaron fuentes judiciales.

Los cuatro acusados fueron arrestados el pasado 26 de septiembre.

La ex presidenta Tian declaró en su defensa que supo de las quejas de los consumidores sobre leche adulterada a mediados de mayo, cuando se registró la primera muerte de un bebé, y decidió crear un equipo de investigación, del que ella misma se hizo responsable, para solucionar el problema.

El 2 de agosto, en vísperas de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín, el Grupo Sanlu presentó un informe por escrito sobre la leche en polvo afectada al gobierno local de Shijiazhuang (donde la firma tiene su sede), añadió Tian.

El escándalo de intoxicación alimentaria, uno de los peores que se han registrado en China en los últimos años, no se hizo público hasta que terminó la cita olímpica.

En caso de ser declarados culpables, los cuatro ex directivos podrían enfrentarse a condenas de hasta cadena perpetua.

Desde el viernes pasado y hasta hoy otras 17 personas han sido juzgadas en distintos tribunales de la provincia de Hebei acusadas de añadir la melanina a la leche en polvo o de haber vendido leche ya adulterada a la planta de Sanlu y a otras firmas lácteas de todo el país.

El Grupo Sanlu dejó de producir el pasado 12 de septiembre y presentó una petición de bancarrota, con una deuda de 114.628 euros (161.000 dólares).