En total, Versalles prevé cerrar 2008 con 5,5 millones de visitantes, frente a los 5 millones del año anterior, precisaron sus portavoces.

Rodeado de polémica, incluso jurídica, el éxito del artista neo-pop en el territorio de Luis XIV de Borbón (1638-1715) ha sido tal que la exposición fue prolongada casi un mes más para poder saciar la curiosidad y el interés despertado entre los amantes del arte contemporáneo y del histórico monumento.

En principio prevista hasta el 14 de diciembre, este injerto de arte contemporáneo en el patrimonio nacional francés, firmado por el celebérrimo ex corredor de Bolsa y ex marido de la ex estrella italiana del porno Cicciolina, fue ensalzado y criticado desde su apertura, el 10 pasado septiembre.

La causa llegó hasta los tribunales, pues el príncipe Charles-Emmanuel de Bourbon-Parme, quien afirma ser descendiente directo de Luis XIV se querelló en su intento de hacer cerrar esta muestra, en su opinión "mercantil", "pornográfica" y "profanadora", que "atenta contra los muertos".

Aunque juzgada y desestimada la causa por el procedimiento de urgencia absoluta, el pasado 24 de diciembre, no se dio por vencido y anunció hoy su intención de apelar al Consejo de Estado.

Para el ex ministro de Cultura Jean-Jacques Aillagon y actual presidente del sitio, la experiencia es concluyente: "cuando hay debate, es bueno para nosotros".

Aillagon se dijo, asimismo, convencido de la "necesidad" de reanimar el interés del público por el rico patrimonio versallesco.

Con la veintena de obras monumentales presentadas por Jeff Koons acaba de confirmar su intuición de que ofrecer al menos una vez al año "acciones excepcionales" y provocar un "diálogo entre las obras del pasado con las del presente" puede ser un excelente método.

En términos de taquilla, fundamentales para el equilibrio financiero de Versalles junto con las subvenciones estatales y el mecenazgo, la presencia de Jeff Koons dio un mes de octubre "excelente" y un mes de noviembre "excepcional", con un 20% más de visitantes que en 2007, informaron los portavoces del monumento.

Al hacerse eco hoy de su rotundo éxito, el vespertino "Le Monde" adelantaba la existencia de conversaciones "en curso" con el escultor Xavier Veilhan, quien podría llegar a Palacio el próximo otoño, aunque solo a sus jardines.

El coste de la manifestación rondó los dos millones de euros, de los que 300.000 euros fueron costeados por el palacio.