Al igual que Tony Lomba y Elio dos Santos, Ectoplasma, la formación viguesa liderada por Nicolás Pastoriza, siempre toca (como el Gordo) en Navidad. Si hace ahora un año interpretaban en La Iguana los temas de “Amor por lo paranormal”, hoy (12 de la noche) vuelven al lugar del crimen para adelantar las canciones de su segundo álbum, “Villa Angelina”, un disco de próxima aparición grabado a la vieja usanza. En esta ocasión el quinteto vigués no aprovechará las psicofonías e impregnaciones de su anterior producción paranormal: han decidido partir de cero, aglutinando diez canciones inéditas sin recuperar ningún tema no grabado anter i o r mente .
“Hemos decidido autoproducir el disco, tirar de pasta y rascar el bolsillo”, comenta con retranca Pastoriza, guitarrista y vocalista de esta banda que integran también Gael Pintos, (batería), Iria Armesto (violín y coros), Saúl Puga (bajo) y David Rodríguez Rial (teclados y trompeta).
Los componentes de Ectoplasma se encerraron hace mes y medio para registrar el nuevo álbum, cuya mezcla se ultimará pronto y que estará disponible a principios del próximo año, al menos en internet.
Los músicos utilizaron aparatos antiguos, como reverbs de cinta, viejos compresores y amplificadores, sintetizadores analógicos y otros cachivaches comprados en eBay. Les ha salido -Pastoriza dixit- “un disco más orgánico y retro de sonido, sin demasiados artificios digitales”.
El pop británico sigue siendo una influencia innegable y en las letras no han dejado de lado las aventuras fantásticas y surrealistas, aunque ahora los textos son “más personales, basados en historias recogidas en la calle, de lo que dice la gente en la cola del supermercado; de los artículos de prensa y los programas de televisión”, explica Pastoriza.
El productor es Gonzalo (“Gonxo”) Pedrido, con el que trabajaron en las sesiones del disco en solitario de Silvia Superstar. Grabaron en unos estudios de Lavadores, una antigua finca llamada “Villa Angelina”, un nombre que a Pastoriza le recuerda a “El fantasma de Canterville” de su adorado Oscar Wilde. “Suena como ‘Abbey Road’, mi disco favorito de los Beatles”, apunta el músico vigués, aunque para la cubierta no se han hecho la foto en ningún paso de cebra, sino en una vieja casa de A Pobra do Caramiñal.
El resultado fue una grabación “artesanal” y divertida, una calidez que esta noche a buen seguro trasladarán a La Iguana, un escenario ya familiar que Ectoplasma considera “como el salón de casa”. Tocarán la totalidad del nuevo disco y temas ya conocidos junto a músicos invitados habituales de estos saraos navideños. Un
