"Pienso que hay una pluralidad en el cine brasileño que, de alguna manera, traduce la propia realidad de Brasil: que son muchos Brasil dentro de uno solo. El cine no es la verdad sobre Brasil, es más una mirada, muchas miradas", ha comentado el actor en declaraciones a Efe, que acudió a Barcelona para inaugurar el III Cine Fest Brasil, organizado por la Fundación Inffinito.

Protagonista también de las premiadas cintas "Cinema, aspirinas e urubus" (2005), de Marcelo Gomes, y "Mutum" (2007), dirigida por Sandra Kogut, Jou00E3o Miguel es considerado uno de los talentos emergentes del cine brasileño.

Sobre la cinta de Marcos Jorge, "Estómago", con el cual se abrió la muestra barcelonesa, el intérprete ha destacado la habilidad de abordar temas universales como el sexo, la comida y el poder, a través de un guión "que no tiene miedo de comunicarse con el público".

Este tipo de conexión es, ha comentado Jou00E3o Miguel, una de sus principales satisfacciones como actor, y es ahora cuando comienza a percibirlas gracias a sus trabajos en películas, a pesar de que se trata de un medio que no tiene tanto poder de penetración social en Brasil como la televisión.

Si bien ha realizado algunos trabajos para la pantalla chica, Miguel reconoce ser "un actor privilegiado" que surgió de los escenarios teatrales y que puede vivir del cine sin depender de la industria televisiva.

"Para mí es muy bueno percibir que es posible también conectar con las personas, pero sin duda la televisión es el vehículo industrial más fuerte, más popular. Pienso que es un vehículo a través del cual se pueden hacer cosas muy buenas", ha dicho.

Su declarada admiración por el presidente de su país, Luiz Inácio Lula da Silva, además de su participación en dos proyectos paralelos, le llevó a rechazar la invitación del director Fabio Barreto para interpretar al político en una película.

"Lula es un personaje maravilloso, hablando como actor. Creo que conectó con el inconsciente de Brasil. Es un fenómeno, como lo es que un indio (Evo Morales) sea presidente en Bolivia, o como el propio fenómeno Hugo Chávez (en Venezuela), con todos los cuestionamientos posibles", ha señalado.

Aunque no considera que expresar su opinión política sea "una responsabilidad" de los artistas, Jou00E3o Miguel defiende la idea de que "todos los ciudadanos son políticos por naturaleza" y que deben tener libertad para pronunciar sus ideas de acuerdo con la coherencia personal de cada quien.

"Creo que no debería ser una obligación. Pero vivimos en un mundo donde la celebridad se cultiva mucho, y a veces nos sentimos obligados a hablar de todo", ha afirmado.

El actor considera, además, que "el arte también es político, porque siempre se posicionará de alguna manera y vestirá la camisa de lo que está haciendo".

Acostumbrado a ver su propio país a través del cine, y a vivirlo y representarlo desde el extranjero, Miguel confiesa que es "el cambio interno que se produce" lo que le seduce de cada viaje que realiza; por eso, recomienda a quienes tienen la experiencia de vivir fuera de su país aprender de aquello que ven.

"Mi mensaje para la gente de América que se encuentre aquí es que pueda conocer lo que le rodea de una manera personal para cambiar su mirada sobre lo propio. Cuando salimos de nuestro lugar podemos vernos mejor, y ese cambio que se produce es lo que importa", ha reflexionado.