Stalin nunca pensó en instalar una república popular en_España, como pretendió la mitografía franquista._Su estrategia está claramente documentada y la conocían los republicanos. Lo que quería, simplemente, era evitar la fragilización de Francia. Antes que la solidaridad con la izquierda estaban los intereses geoestratégicos de la Unión_Soviética". Esa fue una afirmación central de la charla que dio ayer en el_club_FARO Ángel Viñas, especialista en la política exterior del franquismo y de la Transición.

Presentado por Rosa Pascual, catedrática de Historia en el IES Escolas_Proval de Nigrán, el eje de la conferencia fue una pregunta: ¿por qué perdió la República la guerra civil?._Un tema al que Viñas dedicó muchos años y sobre el que ya escribió una trilogía ensayística centrándose en los archivos de la época porque, según dijo, "diversas costras interpretativas se habían acorazado y superpuesto a lo largo del tiempo y era necesario romperlas yendo a las fuentes".

La primera de ellas era, siguiendo a este (también) catedrático de Economía, la mitografía franquista impuesta por los vencedores y que duró hasta el tardofranquismo de los años 70. En segundo lugar, las querellas en el exilio entre los vencidos y sus diversas interpretaciones "justificativas" de la derrota._Y la tercera "costra", la más importante de todas, "haber interpretado la Guerra Civil desde la óptica de la Guerra Fría, porque ésta aún no existía entre el 36 y el 39. Esa visión ha hecho mucho daño, sobre todo, entre los anglosajones".

Entre legajos

Viñas apuntó que al final de todo su trabajo de años investigando entre legajos le llevó a la confirmación admirativa de que sus tesis sobre las causas por las que la_República perdió la guerra habían sido declaradas en ese tiempo aunque de modo intuitivo por Azaña, y en el orden de importancia que el investigador había confirmado. "Mi trabajo ha servido para darle la razón", dijo.

¿Cuáles son esas causas para Ángel Viñas (y para_Azaña)? En su opinión, son cuatro grandes razones por este orden: una, inhibición de las democracias occidentales, que no ayudaron a la República agredida desde el interior y exterior; dos, la agresión de las potencias del Eje,_Alemania e Italia, que ayudan a Franco; tres, las discordias internas en el campo republicano; la cuarta, la capacidad y potencia militar del bando vencedor. A cada una de ellas se aplicó por separado con un discurso documentado, ordenado y didáctico.

En cuanto al primero, la inhibición de las democracias, afirmó que los ingleses se niegan desde el primer momento a ayudar a la República, lo mismo ocurre con_Francia e incluso Estados Unidos decreta el embargo de material bélico para ella . El Gobierno británico, alarmado por informaciones de su embajada e inteligencia que le hacían suponer una "amenaza roja", llega a preferir un gobierno de Franco porque cree que asegura ley, orden, paz y la no injerencia comunista o eso ofrece. Y que, acabada la guerra, tendrá que volver al redil de las democracias. "Inocente creencia", dijo.

"Cómo la República podía imaginar -afirmó- que, guardando excelentes relaciones con las potencias democráticas y apoyando sus principios, no iba a ser ayudada por algún medio ante una agresión interna y externa de tal calibre".

Una segunda causa de la derrota fue la ayuda de Alemania e Italia. "No había semana que no llegara algún barco con armamento y otras provisiones -dijo- pero la ayuda es también en decenas de miles de soldados alemanes e italianos. Esta ayuda, según Viñas, hacía suponer tanto a dirigentes republicanos como servicios de inteligencia de varios países que la guerra estaba perdida desde el principio, aunque la derrota la retrasó la ayuda de Stalin, motivado por intereses anteriores a la solidaridad con la izquierda. "Stalin tenía miedo a una conflagración con Alemania y que la URSS se quedara sola. Esa soledad le atormenta porque sabe que no es fuerte. Necesita el apoyo de las potencias occidentales y lo cree encontrar en Francia, pero ésta le esquiva. Lo busca en Gran Bretaña, y también".

"Es Franco quien permite resistir a los republicanos"

De acuerdo con la investigación de Viñas, por tanto, las razones de la ayuda de Stalin a la_República fueron, en primer lugar, geoestratégicas, de defensa de su seguridad internacional evitando la fragilización de Francia; y para demostrar a las potencias fascistas que cualquier otra agresión exterior como la que estaba sufriendo la República española sería defendida por la URSS con la fuerza. "Si no se tienen en cuenta -afirmó- los vectores internacionales que confluyeron en la guerra civil, no puede justificarse el alargamiento de la guerra ni tampoco la derrota".

¿Y la tercera causa de esta derrota? Para este investigador la conforman las discordias internas de la República. "Fueron un factor de debilidad -reconoció-, representadas por un sector (cenetistas y otros) que pensaba que había que ganar la revolución, y otro (comunistas y otros) que creía que lo prioritario era ganar la guerra._Estas disensiones se dieron sobre todo el primer año, remitieron después y reaparecen más tarde. Aunque esto no gusta oírlo, creo que la República siguió resistiendo porque Franco prefiere una guerra larga que le permita masacrar no sólo al Ejército Popular sino a la representación civil de la "antiEspaña" por un método menos lesivo a su imagen que las depuraciones posteriores, aunque no excluyeran a estas. Es Franco y no_Stalin quien salva a la República en 1938".

La cuarta causa es, según_Viñas (y_Azaña) la mayor capacidad del ejército rebelde. "Es la razón última -dijo- pero sin la ayuda que recibió_Franco de Alemania e Italia es muy difícil imaginar que hubiera ganado la guerra. Entre los fallos de la_República estuvo la incapacidad para lograr un mando militar unificado. Otro fue la no subordinación de los nacionalismos periféricos de sus intereses a los de la unidad._"Tanto el PNV vasca como la ERC catalana traicionaron los intereses de la_República".