Un informe sobre lenguas regionales o minoritarias publicado ayer por el Comité de Ministros del Consejo de Europa subraya que la población castellanohablante, mayoritaria en España, “parece no ser suficientemente consciente” del carácter multilingüe de la sociedad española.

El comité de expertos que ha redactado el informe recomienda a las autoridades españolas “promover las virtudes del multilingüismo y la diversidad lingüística”, tanto en grupos lingüísticos mayoritarios como minoritarios.

De acuerdo con el informe publicado ayer, los medios de comunicación españoles “demuestran poco interés” por la diversidad lingüística.

Aún así,el informe reconoce “el alto grado de reconocimiento y protección”del que se benefician las lenguas regionales, ya que España “ha optado por respetar los compromisos más exigentes”.

Además de analizar la situación del gallego, el catalán y el euskera en sus correspondientes comunidades,el informe pide más protección el bable asturiano, la fabla aragonesa, el catalán en Aragón,el gallego en Asturias y Castilla y León, el portugués en Olivenza (Badajoz), el bereber en Melilla, el árabe en Ceuta, el romaní y el caló.

El Gobierno estatal realizó observaciones al informe y destacó la creación del Consejo de Lenguas Oficiales en la Administración General del Estado, para mejorar el acceso y el nivel de multilingüismo en la administración electrónica; la redacción bilingüe de material impreso y señalizaciones; y la mejora de la oferta formativa para los funcionarios. Según el Ejecutivo, 19.154 funcionarios hicieron cursos de formación lingüística entre 2004 y 2008, lo que equivale a 67.179 horas escolares con un coste de 1,84 millones de euros.