AMAIA MAULEÓN  Vigo

El amerizaje forzoso de los Reyes Magos en la ría de Vigo y el consiguiente linchamiento de los falsos reyes a manos de los indignados niños; el suicidio de un frustrado profesor universitario en el Pórtico de la Gloria; la brutal autolesión de un afectado por la autovía, al no poder soportar los constantes ruidos, o la muerte de un miembro de la coral polifónica mientras sus compañeros siguen el concierto sin inmutarse. Estas son algunas de las pequeñas-grandes historias que José Sánchez Pedrosa relata en su libro "Contento del mundo", que acaba de publicar Ediciones del Viento.

Los breves relatos de este libro (cuarenta y cuatro en poco más de cien páginas) consiguen estremecer al lector. Un humor ácido y muchas veces cruel llena las páginas escritas por este vigués residente en Niza que, con el título irónico del libro, expresa su disconformidad con la realidad.

Pedrosa es profesor de literatura en un instituto de la ciudad francesa y este es el primer libro de relatos que publica. "Empezar a publicar tarde tiene la ventaja de que luego no te arrepientes por haber mostrado esos primeros escritos de los que ya no estás orgulloso", asegura.

Las pequeñas historias muestran situaciones tan reales como la vida misma. "No soy amigo de la fantasía; me considero un escritor realista", corrobora. Sin embargo, advierte que ninguno de sus relatos es real: "El chispazo, la ocurrencia, siempre es real, pero luego lo mezclas con la imaginación", explica.

Sus páginas están pobladas de personajes crueles hasta el límite o bien al borde de la locura y el escritor no muestra ninguna piedad hacia ellos. "Desquiciados, los personajes sobrepasan los límites de lo convencional y ahí descubren las verdaderas fobias del ser humano", apunta el autor.

La aparentemente cómica situación de unos hermanos que esperan la muerte de su madre o de unos perros que siempre acompañan a su dueña se tornan finalmente en tragedias extremas que "congelan la sonrisa del lector". "En realidad, todos los actos humanos son irrisorios", opina Pedrosa.

Los políticos son las personas que más desconfianza causan a Pedrosa y a ellos les dedica algunas piezas. "La política es el reino de la inautenticidad; serían capaces de hacer cualquiera de las crueles acciones que aparecen en el libro tan sólo por satisfacer sus ansias de poder", opina.

Los lectores gallegos, especialmente los vigueses, disfrutarán de la obra al reconocer multitud de lugares de la ciudad, lo que hace creíbles las situaciones absurdas y exageradas que plantea. "El decorado es completamente gallego, pero el objetivo no es retratar Galicia", comenta.

El protagonista de "Esquizofrenia" descubre un día que su casa huele insoportablemente "a Galicia". Huye de ese olor hasta que descubre que procede de él mismo. Pedrosa, en Niza, ya no huele a Galicia. "Uno no lleva consigo una identidad colectiva, aunque siempre conserva algo de donde procede", asegura.

Monopolio de la novela

Sánchez Pedrosa es un apasionado del relato corto. "Es un fogonazo donde nada sobra; todo tiene su utilidad", define. La concisión de los relatos de "Contento del mundo" les da un aire casi de atestados policiales o crónicas periodísticas. "Si puedo meter al lector en la historia en un solo párrafo, para qué voy a escribir cinco; la brevedad y la concisión son mis objetivos", justifica.

El escritor lamenta la escasa consideración que el sistema editorial español tiene hacia este género. "Hay un monopolio absoluto de la novela que no comparto en absoluto; parece que no existan otros géneros como el relato corto, el ensayo o el teatro". En otros países como Francia, destaca, "está mucho más diversificado".

Además, en una sociedad con prisas como la que vivimos, "el relato corto es muy útil, ya que salimos de trabajar tarde y puede costar enfrentarse a una novela larga", concluye.