A través de sus libros, Michael Crichton sirvió de inspiración a estudiantes de todas las edades, desafió a científicos en muchos campos e iluminó los misterios del mundo de una forma que pudimos comprender todos". El comentario de la familia de Michael Crichton se colgó ayer de la página web del escritor para anunciar el fallecimiento del mismo. A los 66 años de edad, el autor norteamericano -uno de los escritores superventas del mundo con más de 150 millones de volúmenes vendidos- moría de forma "inesperada" tras plantar "una valerosa y privada batalla contra el cáncer".

La familia del autor de novelas como Parque Jurásico o Mundo perdido (ambas llevadas al cine donde se convirtieron en éxitos de taquilla) así como creador de la serie Urgencias (en la que George Clooney saltó a la fama y que desde 1994 cosechó premios Emmys) alabó al escritor pero también a la persona. De Crichton, destacaron que era "un marido devoto, un padre cariñoso y un amigo generoso", según se recogía en la web oficial del autor, a la que era prácticamente imposible volver a entrar a última hora de ayer una vez se fue expandiendo la noticia de su defunción.

Funeral privado

El literato ha dejado una hija, Taylor; y una esposa, Sherri que añadieron en la web que "él será echado profundamente de menos por aquellos cuya vida tocó". Según la información de la familia, es deseo de ésta brindarle un funeral privado, es decir, en la intimidad y lejos del circo mediático.

Aunque sufría cáncer desde hace tiempo, el escritor estadounidense y su editorial tenían previsto publicar el próximo mes en Estados Unidos su última obra -según informa la BBC en su web-; no obstante desde la compañía HarperCollins se indicó que ahora la edición sería postpuesta de forma "indefinida".

A pesar de ser conocido como el pade del tecnothriller, por sus novelas en las que mezclaba terror con contenidos científicos o tecnológicos, Michael Crichton también dedicó su carrera como escritor a cuatro libros de no ficción como "Cinco pacientes", "Viajes" o "Jasper Johns".

Su relación con el cine no sólo se limitó a la selección de sus obras para los argumentos (unas doce fueron llevadas a la gran pantalla), sino que participó como coproductor o coguionista en algunas, además de crear una compañía de software llamada Film Track en la que desarrolló programas informáticos para la producción de filmes en los años 80.

Por si fuese poco, su porte lo colocó en el año 1992 en la lista de las 50 personas más guapas, establecida por People.