Todos los días, a partir de mañana y hasta el 16 de noviembre, un atleta correrá a toda velocidad los 86 metros de la galería central de la Tate Britain, ante la segura sorpresa de los visitantes.

Cada carrera será seguida de una pausa de treinta segundos, pero después otro u otra atleta repetirá la acción, corriendo por entre las esculturas de esa galería -dedicada al arte británico- como si le persiguieran mil diablos.

Se trata, según anunció hoy la Tate, de una "creación" de Martin Creed, artista británico de 40 años que ganó el premio Turner en el 2001 con una instalación minimalista consistente en una habitación vacía en la que una bombilla se encendía y apagaba alternativamente.

"Me gusta correr y me gusta ver correr a la gente, explicó hoy Creed, quien agregó algo evidente: "Correr es lo contrario de estar quieto".

"Si uno piensa en la muerte como en la quietud absoluta y en el movimiento como un signo de vida, entonces el mayor movimiento posible es el mayor signo de vida", afirmó con fácil filosofía.

"Correr muy rápido es justamente lo opuesto de la muerte, es una muestra de que se está vivo", insistió el artista británico para justificar su creación "conceptual". Creed explicó que se le ocurrió la idea de llevar ese sprint a la Tate cuando fue a visitar con unos amigos las catacumbas de los monjes capuchinos en Palermo (Sicilia).

Apenas faltaban cinco minutos para que cerraran el museo, por lo que tuvieron que hacer el recorrido a todo correr. Para realizar su creación en la Tate Britain, a la que se ha dado el nombre de "Obra número 850", se ha recurrido a medio centenar de atletas, que se irán turnando.

Como el arte conceptual parece necesitar siempre explicaciones, el director de la Tate Britain, Stephen Deuchar, tuvo hoy a mano algunas para los periodistas.

"Martin Creen -dijo Deuchar- ha respondido al espacio histórico de la galería con un proyecto interesante, simple y lírico. Al sacar una actividad cotidiana de su contexto habitual para situarla en las galerías centrales de la Tate Britain, ha trastornado cualquier idea preconcebida de cómo hay que moverse aproximadamente por un espacio artístico".

Y, continuó el director de la Tate Britain, "al mismo tiempo, (el artista) nos invita a reinterpretar una actividad mundana (el acto de correr) como si fuera un acontecimiento teatral". El evento artístico lo ha patrocinado por cierto la casa de subastas "Sotheby's", cuyo presidente, Bill Ruprecht, explicó hoy que el patrocinio de su empresa ha permitido convertir de bienal en anual el encargo a un artista británico de una obra para ese espacio de la Tate Britain.

La creación coreografiada de Martin Creed recuerda la intervención de signo muy distinto de otro artista en un museo londinense: la National Portrait Gallery (Galería Nacional del Retrato), en cuyas salas el belga Francis Alys introdujo un zorro.

Unas cámaras de vídeo grabaron el recorrido nocturno del animal por las distintas salas de la galería, todo lo cual quedó grabado en un vídeo que Alys tituló, no sin ironía, "Ronda Nocturna".