Están previstos más de 600 espectáculos en vivo, con los que los organizadores quieren "acercar y normalizar" esta cinematografía y esperan superar el 30 por ciento de asistencia de público femenino del año pasado.

Juli Simón, director de FICEB, presentó hoy en Madrid esta nueva edición del festival, que con su nueva ubicación experimentará "un cambio de modelo y una evolución". "Queremos plasmar mejor las actividades del sector en todos los formatos", señaló, apuntando que traer el FICEB a Madrid era una decisión "lógica" porque es "centro de decisión" de esta industria.

El FICEB contará un año más con dos ofertas: por un lado, el festival de cine, con 50 películas españolas a concurso, que serán seleccionadas por un jurado "raro, mezcla de expertos y personas que no saben nada del porno pero les gusta", presidido por Juanma Bajo Ulloa.

Dos "iconos" del cine para adultos estarán en el FICEB para recibir sendos homenajes: el actor de culto Rocco Siffredi, que ha participado en más de 1.300 películas; y la actriz checa Silvia Saint, 'favorita' de la revista 'Penthouse', con más de 200 títulos en su currículum.

ESPAÑA, CUARTA POTENCIA.

También habrá espacio para el cine 'X' español de los años 80, con la proyección de tres títulos clave, dirigidos por José María Ponce. Y es que la industria española del cine para adultos ha sufrido una evolución en los últimos años, pasando a ser la cuarta potencia a nivel europeo. En España, donde esta industria facturó en 2007 un total de 470 millones de euros, se rodaron un total de 180 títulos y se vendieron cerca de 700.000 unidades de las 1.000 comercializadas.

El FICEB, además, contará con una parte "lúdica" y más de 600 espectáculos, distribuidos entre la 'Hard Zone', un escenario de "alto contenido erótico", como detalló el portavoz del FICEB Max Cortés; la 'Artist Zone', con los stands de las productoras; la carpa "especialmente divertida" 'Territorio Canalla', con conciertos, concursos y donde se celebrará la final del concurso Rey y Reina FICEB 2008; o la 'Party Zone', que contará con sesiones de DJs a cargo de Alaska, Nacho Vidal y Mikel Molina.

Además de una zona comercial, con sesiones lúdicas y formativas de 'tupper-sex', venta de lencería o pastelerías eróticas, el FICEB (que es "cantera de jóvenes directores y actores") traerá a Madrid una exposición fotográfica, con instantáneas de las diferentes ediciones del certamen, a cargo de Isabel Muñoz, Christian Maury, o Joan Crisol.

En el FICEB, que contará con más de 20 pantallas en las que de proyectarán películas y los espectáculos que se celebran en los diferentes escenarios, se rodará, además, una película sobre esta edición a cargo de Pepe Catman. Y la 'madrina' del festival, Sonia Baby, anunció que batirá un récord guiness con su espectáculo "100 metros de bandera".

"SENSUALIDAD + SEXUALIDAD".

Desde sus inicios, el FICEB ha ha ido evolucionando y ha pasado de recibir 1.500 espectadores (de los cuales sólo el 1 por ciento eran mujeres) hasta conseguir los 40.000 visitantes del año pasado (y más del 30 por ciento de asistencia de público femenino). "No buscamos al consumidor habitual", precisó Simón, agregando que se trata de "acercar y normalizar" el porno al conjunto de la sociedad. "Que abarque todo tipo de sensualidad y sexualidad", apuntó sobre "un festival que no es en absoluto sexista".

El FICEB, al que también asistirán estrellas del cine para adultos como Anastasia Mayo, Eva Roy, María Lapiedra, Dunia Montenegro, Natalia Zeta, Gigi Love o Roberto Malone, entre otros muchos, arrancará mañana martes con un foro-debate en la Fnac Callao; proseguirá el miércoles con una "cena de gala" en la sala Florida Park del Retiro, donde se entregará los Premios Ninfa.

Las entradas para el FICEB, cita a la que se sumará de nuevo en Madrid el próximo mes de octubre el FICGay, ya están a la venta al precio de 20 euros, en compra anticipada. En taquilla el precio será de 25 euros. Habrá autobuses gratuitos desde la Estación de Atocha ("frente a la churrería") a partir de las 23.00 horas. Los horarios, "desde las 17.00 horas en adelante".

La elección de la sala Fabrik, se debe a que el festival prefirió que se celebrara en una sala privada. "Las autoridades miran el sexo desde dos puntos de vista: no lo critican, pero no hablan abiertamente de ello", concluyó Simón, detallando que a todos los políticos este tipo de eventos les produce "miedo y prefieren la prudencia".