Fuentes de la Conselleria de Sanidad han confirmado hoy a EFE que se ha tomado esta decisión tras detectar que once niños de esta guardería están afectados por esta enfermedad vírica que puede haberse contagiado a través del intercambio de juguetes u objetos personales de los menores.

Técnicos de la Dirección General de Salud Pública fueron advertidos la pasada semana de esta situación y tras iniciar una investigación determinaron que se trataba de una "onicomadesis".

El pasado viernes celebraron una reunión con los padres de los niños y niñas de la escuela infantil a los que comunicaron cual era el problema y las medidas que se iban a adoptar, como análisis de sangre y pruebas dermatológicas.

Las mismas fuentes han señalado que al tratarse de un virus el único tratamiento posible es tópico para la reparación de las uñas, y han indicado que se trata de un problema que remite "espontáneamente, no deja secuelas y las uñas vuelven a crecer de forma normal".

Salud Pública ha decidido que todos los niños de la Escuela Infantil, cerca de un centenar, sean sometidos al análisis sanguíneo para descartar en ellos la presencia del virus, ya que algunos pueden ser portadores aunque aún no lo hayan desarrollado.

La onicomadesis es una infección provocada por un virus y que provoca la muda de las uñas, comenzando en la matriz y volviéndose completa, aunque no tiene otros síntomas.

La Conselleria ha indicado que en principio la escuela infantil sigue abierta, ya que el foco del virus son los propios niños y no las instalaciones escolares.