Unas 30.000 personas acudieron la madrugada del viernes al sábado al conjunto megalítico de Stonehenge (suroeste de Inglaterra) para celebrar el solsticio de verano, informó ayer el English Heritage (Patrimonio Nacional), responsable del monumento.

Una variopinta multitud -druidas, hippies, devotos del sol y curiosos- se dieron cita ante los enormes bloques de piedras que componen el círculo prehistórico para presenciar los primeros rayos de sol del día más largo del año.

El sol despuntó ayer en el horizonte a las 03:58 horas GMT, un acontecimiento que fue recibido por algunos de los congregados con bailes, mientras unos cuantos retozaban desnudos y otros simplemente contemplaban el cielo saboreando una cerveza.

Pese a que la lluvia amenazó con empañar el solsticio, la muchedumbre, que pasó la noche acampada en Stonehenge, fue la más numerosa de los últimos cinco años, según el English Heritage.

Asimismo, el evento transcurrió pacíficamente, indicó la Policía, que sólo efectuó quince arrestos por delitos menores de desorden público.

El Templo del sol

"Es un gran experiencia. Se trata de celebrar la naturaleza, la vida y lo que hace funcionar al mundo", comentó un hombre que se identificó como Cathbad y no quiso perderse el espectáculo.

El famoso enclave prehistórico, de unos 5.000 años de antigüedad y denominado también "El Templo del Sol", es desde hace varias décadas el lugar elegido para festejar la llegada del verano boreal a Inglaterra.