El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, alertó hoy del calentamiento global y sus efectos, como el aumento de las temperaturas del aire y del mar y pautas extremas en la meteorología, poniendo en peligro no sólo el planeta sino también planteando una gran amenaza a la salud de los hombres, al recalcar que "el cambio climático es real, se está acelerando y es una amenaza para todos nosotros", por lo que llamó a una acción colectiva para combatir su azote por el bien del planeta.

En el mensaje realizado en el Día Mundial de la Salud, Ban Ki Moon dijo que, además de causar frecuentes y severas tormentas, olas de calor, sequías e inundaciones, el cambio climático hace peligrar la calidad y la disponibilidad del agua y la comida, "determinantes fundamentales de la nutrición y salud". Acentuó además la necesidad de "dar voz a esta realidad a menudo ignorada", asegurando que "la protección de la salud está anclada en el corazón de la agenda del cambio climático global".

El secretario general añadió que serán los habitantes de los países pobres quienes carguen con el sufrimiento que se producirá con este calentamiento global, como la malnutrición y las enfermedades infecciosas relacionadas con el clima, que se llevará el mayor número de víctimas mortales en los más vulnerables: los niños pequeños, los ancianos y los enfermos. Las mujeres que viven en la pobreza afrontan un riesgo particular cuando golpeen en sus países los desastres naturales y otros peligros relacionados con este calentamiento.

Por su parte, la directora general de la Organización Mundial de la Salud, Margaret Chan, dijo hoy que "la preocupación central es que el cambio climático pone en peligro la salud humana".

"El calentamiento del planeta será gradual, pero los efectos de los sucesos de la meteorología extrema -como más tormentas, inundaciones, sequías y olas de calor- serán repentinos y muy acusados", añadió.

Chan subrayó que los hombres ya están expuestos a los efectos de las enfermedades relacionadas con el clima, como la malnutrición, que provoca cerca de 3,5 millones de muertes al año o la malaria, que mata a cerca de 1 millón de personas al año.

Los sucesos más recientes, como la ola de calor que se produjo en Europa en el año 2003, el huracán Katrina, que asoló Estados Unidos en 2005 y las epidemias de cólera que se produjeron en Bangladesh son sólo unos ejemplos de lo que se puede esperar en el futuro. "Estos sucesos no pueden ser atribuidos únicamente al cambio climático, pero son retos que, creemos, se convertirán en más frecuentes e intensos con este cambio en el clima", dijo Chan.

Para tratar los efectos sobre la salud relacionados con el cambio climático, la OMS está coordinando y apoyando investigaciones sobre las formas más efectivas para proteger la salud, de una forma especial a los más vulnerables como las mujeres y los niños en países en desarrollo.

También está avisando a los Estados miembros de la ONU sobre la necesidad de cambiar los sistemas sanitarios para proteger a sus poblaciones, y habrá que trabajar estrechamente con ellos en los próximos años para desarrollar medios efectivos para adaptarse a este cambio en el clima y reducir sus efectos sobre la salud humana.