La futura ronda Este, entre O Marco y San Mauro, que servirá de nuevo acceso viario a Montecelo costará menos de 1,7 millones de euros, alrededor de un 20% menos de lo previsto inicialmente, pero por la contra, no estará disponible hasta el año 2019, varios meses después del calendario de obras diseñado en su día por la Diputación.

Cinco meses después de licitarse la adjudicación de este proyecto, la entidad provincial aún no ha resuelto el concurso, si bien ultima el análisis de las 21 ofertas presentadas. Ya dispone de la valoración técnica, con dos empresas destacadas sobre las demás, y trabaja en el estudio de las propuestas económicas, que llegan a plantear rebajas de más de 25% sobre los 2.066.000 millones del presupuesto de salida. Esta documentación económica oscila entre 1,5 y 1,7 millones aproximadamente. A esa cifra se deben añadir las expropiaciones.

Aunque los planes iniciales de la Diputación apuntaban a adjudicar las obras en marzo para su conclusión a finales de este año, el proceso se ha retrasado de forma notable, una demora que se suma al que ya supuso la anulación del primer concurso y la reelaboración completa del proyecto técnico. Con un plazo de ejecución de 9 meses, difícilmente estará disponible la vía antes del primer trimestre de 2019, a las puertas de las elecciones municipales de ese año.

Cinco años

La ronda Este comenzó a gestarse hace cinco años, en 2013, pero arrastra desde entonces un largo periplo de adjudicaciones y renunciar, reforma del proyecto y otros problemas, además de ser objeto de debates municipales por la petición del PP de que se eliminen los "lombos" previstos por ser una ruta básica de las ambulancias. La última modificación del convenio original entre el Concello y la Diputación se firmó en agosto de 2017.

El plan nació como una fórmula para evitar calles estrechas como la Rúa das Olivas, pero la decisión del Sergas de recuperar la ampliación de Montecelo como hospital único relanzó la importancia de la ronda. El vial tendrá una longitud de 970 metros con una única calzada y dos carriles de circulación de 3,50 metros cada uno, con arcenes de un metro. También contará con una senda peatonal para ciclistas y peatones. El trazado se iniciará en la glorieta existente en la PO-542 (O Pino-Bora) a la altura del antiguo establecimiento de Muebles Juviol. A partir de ahí la nueva vía tomará dirección noreste hasta alcanzar la calle Pedra do Lagarto, en la que se levantará una nueva rotonda. Finalizará en una tercera glorieta, que se construirá sobre la carretera PO-532 en las cercanías del acceso actual al complejo Príncipe Felipe y Hospital Montecelo. El cruce actual se modificará para realizar la nueva conexión.

Las dos nuevas glorietas tendrán una calzada con dos carriles de 4,5 metros cada uno y arcenes de un metro. La primera tendrá un diámetro exterior de 42 metros, mientras que la segunda, que consta de cuatro accesos y deja previsto un quinto para la prolongación de la ronda, será mayor y tendrá un diámetro exterior de 50 metros.

La nueva infraestructura tendrá un aforo, según los estudios de campo realizados para el proyecto, de unos 5.000 vehículos diarios. Se estima que cerca del 90% del tráfico actual de la calle de las Pereiras y de la calle de las Olivas circulará por la nueva vía cuando esté construida.

Otro de los planes viarios pactados entre el Concello y la Diputación en el municipio, que circula con más lentitud que la ronda Este es el nuevo acceso a Monte Porreiro desde la urbanización de Tafisa, con un presupuesto inicial de algo menos de 1,2 millones de euros.

En este caso, la licitación correrá a cargo del Concello. Será una vía de dos carriles, con una acera a un lado de las casas. Tendrá un total de 605 metros de longitud y aprovecha, en gran parte, el trazado de la Rúa da Reguiña, que será ensanchado, afectando a una treintena de propiedades. La obra levantó en su día el recelo de los vecinos, que temen que el tráfico se desvíe por delante de sus casas, ya que la pretensión municipal es que la actual avenida de Buenos Aires pierda buena parte de la circulación actual y se elimine de la orilla del río.