El Concello de Poio ha emitido estos días un bando alertando de la necesidad de mantener limpias de maleza y arbolado las fincas y terrenos que se encuentran en suelo urbano, urbanizable o de núcleo rural, así como en un perímetro de 50 metros desde estos límites, creando franjas de protección frente los posibles incendios.

Así, en caso de incumplimiento y en aplicación de la última modificación en la Ley de prevención defensa contra incendios, el Ayuntamiento podría entrar de oficio y limpiar o cortar la arbolada y posteriormente vender la madera para sufragar la operación, además de imponer las correspondientes multas a los propietarios de los terrenos.

De este modo, las fincas deberán estar limpias y la maleza no podrá invadir la vía pública. Además, está prohibido echar cerrillas, cigarrillos o basura a ellas. En las zanjas y caminos que den hacia la vía pública, el propietario debe evitar la presencia de malezas. Asimismo, las masas forestales deben estar, como mínimo, a 50 metros de viviendas.