El puente del Primero de Mayo vuelve a dejar datos positivos en lo que respecta a la ocupación turística en las Rías Baixas, según las cifras que desveló ayer la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva. Según los datos recogidos por la institución provincial, este periodo vacacional se cerró con casi un diez por ciento más de ocupación de lo inicialmente previsto, a pesar de que el tiempo no fue del todo bueno. Así, los establecimientos hoteleros de la provincia registraron un 62,5% de ocupación, frente al 53% previsto por Turismo Rías Baixas.

La comarca de Caldas, con su oferta de turismo termal fundamentalmente, lideró los datos de ocupación durante estos días con un 84%. Destaca también la elevada ocupación registrada en el área de Vigo (con un 70%) y Deza-Tabeirós con un 65% (en esta comarca se multiplicaron las expectativas dado que se esperaba una media de un 34%). O Baixo Miño alcanzó un 63%, O Salnés un 62%, Pontevedra y O Morrazo un 60% y O Condado Paradanta tuvo una ocupación de 32%, dos puntos más de lo previsto.

En lo que respecta al turismo rural, la ocupación fue de un 43%, lo que supone 4 puntos por encima de las expectativas iniciales. Entre las localidades más visitadas cabe citar Vigo, Pontevedra, Cuntis, Sanxenxo y Baiona.

Perfil del visitante

En cuanto al perfil del visitante. Los datos indican que la mayoría sigue siendo turismo nacional (un 71%) de los visitantes procedentes principalmente de Reino Unido, Argentina y Portugal. Es importante, además, fidelizar a estos turistas dado que el 59% era la primera vez que visitaban las Rías Baixas.

Los datos fueron también positivos en lo que respecta al balance del mes de abril con una ocupación media en la provincia de un 50%. La presidenta de la Diputación remarcó que "en lo que llevamos de año hablamos ya de 190.000 personas que visitaron la provincia lo que supone un incremento del 7,9% con respecto al mismo periodo del año anterior". En los primeros meses de 2018 se alcanzaron más de 365.000 pernoctaciones que significan un incremento del 9,2% con respecto a 2017. Se trata de un crecimiento del turismo que sitúan a las Rías Baixas por encima de la media española ya que a nivel estatal el incremento fue de un 6% en cuanto al número de visitantes y de un 3,7% en lo que respecta a las pernoctaciones, "lo que pone de manifiesto que las Rías Baixas se están convirtiendo en un espacio de gran atracción turística".