La Plataforma Salvemos Vilaboa replicó ayer a las afirmaciones de la Axencia da Protección da Legalidade Urbanística de Galicia sobre la "obligación" de la agencia de cumplir con la orden de derribo de una vivienda en este municipio fijada para el próximo 21 de mayo. La plataforma ciudadana considera que la APLU sí tiene "opciones" y margen de maniobra si de verdad quisiera cuando menos dilatar esta demolición mientras se resuelve la situación de la vivienda.

Para empezar, desde Salvemos Vilaboa resaltan que la APLU no está contestando a los recursos presentados por el vecino afectado, "causándole indefensión, tanto cuando algó que de tirar la casa sería él mismo quien lo haría, para evitar un perjuicio económico mayor", como en el momento en el que alegó que "los plazos según la última modificación de la Ley de Costas están superados".

Recuerdan desde Salvemos Vilaboa que "la Ley de Costas establece la prescripción a los 15 años de la obligación de derribar desde que la administración acuerde su imposición". En este caso, dicho acuerdo se produjo en julio de 2000, por lo que el plazo de prescripción está, a juicio del colectivo, "ampliamente superado, aunque la Consellería intente escudarse en que hay una resolución judicial posterior". Para los vecinos está claro dado que "el literal de la ley es claro y habla de administraciones y no de tribunales".

Señalan que "a mayores existe otro precepto legal, relacionado con la ejecución de sentencias en un plazo máximo de cinco años, ampliamente superado también al datar la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia de octubre de 2009".

Por lo tanto, a juicio de Salvemos Vilaboa, "existen abundantes argumentos de carácter técnico para evitar el derribo de esa vivienda, y además, dado el grave precedente que se crearía, merece una reflexión política que hasta ahora el gobierno gallego no quiso hacer".

El colectivo vecinal añade que "estando el PXOM en trámite y teniendo en cuenta que hay más de 400 viviendas en línea de Costas en Vilaboa, la mitad de las cuales fueron construidas después de la aprobación de la Ley de Costas en los núcleos preexistentes a la entrada en vigor de la misma, lo normal sería que en este momento el gobierno gallego, junto con el gobierno local y el central, estuvieran negociando una salida razonable para el urbanismo en Vilaboa, dado que no estamos hablando de urbanismo salvaje ni especulativo".

Desde el colectivo insisten en que "diálogo y negociación" es precisamente lo que vienen pidiendo desde hace tiempo los vecinos de Vilaboa,con el objetivo de tener "un concello ordenado y una planificación urbanística sensata, hasta la fecha sin resultado, pero seguiremos dando esta batalla".

Más movilizaciones

Este inminente derribo de la vivienda de un afectado, junto con los juicios pendientes por la vía penal a alguno de los afectados, provocaron que los vecinos de Vilaboa hayan decidido retomar e intensificar las movilizaciones para pedir soluciones a la situación del urbanismo en el municipio.

Un paso adelante sería la aprobación del anhelado PXOM, que sigue en fase de tramitación para solventar las objeciones al plan puestas por la Xunta de Galicia. El Plan permitiría solventar la situación de las viviendas en peligro ubicadas e los núcleos tradicionales pero en terrenos calificados como de suelo rústico, ya que se prevé al legalización de muchas de ellas.

La aprobación del PXOM no sería una solución definitiva para las más de 400 viviendas que, tal y como señala esta plataforma vecinal, están en línea de Costas (de las que 200 estarían amenazadas si se construyeron después de la aprobación de la Ley). No obstante, sería una herramienta decisiva para poder tramitar ante el Ministerio de Medio Ambiente la legalización de estos innmuebles y de los núcleos de población ubicados en la línea de costa en este municipio.