El empresariado de la ciudad está de luto por el fallecimiento de José María de Cabo Landín. El que era director gerente del Hotel Rías Bajas, el segundo aún en activo más antiguo de la ciudad tras el Parador, murió ayer sábado a los 64 años de edad en Pontevedra. De cabo fue durante años y hasta hace unos meses el presidente de la asociación de hoteleros de la ciudad.

La sala velatoria estuvo instalada durante toda la jornada de ayer en las dependencias funerarias Virgen del Camino de la calle Loureiro Crespo, por donde pasaron decenas de pontevedreses y amigos para dar su último adiós a uno de los empresarios más conocidos de la ciudad. Después de la incineración de sus restos mortales, que se llevó a cabo ayer, el funeral está señalado para mañana lunes, a las 17.30 horas, en la iglesia de San Bartolomé.

De Cabo, casado y con dos hijas, padecía una larga enfermedad que le llevó a abandonar hace un tiempo la presidencia de la asociación de hoteleros, pero seguía al frente del céntrico hotel pontevedrés, que había fundado su padre, Matías de Cabo. Fue elegido para representar a su sector a finales de 2010 y permaneció en el puesto hasta hace unos meses, cuando dio el relevo a Paula Lourido, del Hotel Madrid. No obstante, su relación con la asociación comenzó con su misma fundación, en 2003, con Patricia Sierra, del Galicia Palace, como presidenta.

De Cabo recibió en 2016 el premio de la Federación Provincial de Empresarios de Hostelería, en el apartado de establecimientos hoteleros. El galardón llegaba poco después de que el céntrico Hotel Rías Bajas, entre Castelao y Daniel de la Sota, cumpliera 50 años. Había sido fundado en 1965 por su padre, Matías de Cabo, un notable emprendedor que murió en 2008 a los 93 años después de poner en marcha también una empresa de distribución de butano y entrar también en el sector de la construcción.

José María de Cabo también se distinguió hace quince años como portavoz de vecinos y empresarios que cuestionaron el modelo de tráfico en el centro urbano, pero también alabó sus ventajas.