Varias decenas de trabajadores de los complejos sanitarios de Pontevedra secundaron ayer la movilización convocada por CIG-Saúde para exigir al Sergas un cambio en la negociación de la carrera profesional. Su objetivo es que esta carrera profesional reconozca el desempeño del trabajo profesional, idea para la que fue concebida, y no se convierta en una penalización retributiva, "tal y como se establece en el documento que presentó la administración sanitaria en la Mesa sectorial".

La Confederación Intersindical Galega de Saúde convocó la primera de estas movilizaciones ayer, dentro de un conjunto de parones que, en principio se repetirán el resto de jueves de este mes. Con ello, el sindicato y los trabajadores pretenden denunciar que el Sergas está presentando "un documento de carrera profesional basado en una serie de obstáculos que impiden que el personal pueda progresar en los niveles de carrera" y además "esconde cuales van a ser las cuantías retributivas de estos grados".

En el comunicado para llamar a las movilizaciones, la secretaria nacional de CIG-Saúde, María Xosé Abuín, denunció que el Sergas "presenta además un modelo de carrera que discrimina, ya que reconoce el derecho solo al personal fijo, dejando fuera al personal temporal cuando el Estatuto Marco establece que la carrera profesional es una retribución complementaria para todos".

Junto a esto, otra de las reivindicaciones se focaliza en el hecho de que también se quedará fuera de la carrera profesional todo el personal fijo que se incorporó al Sergas en los procesos selectivos convocados a partir de 2012, ya que "se exige una antigüedad mínima de cinco años como personal fijo, de los cuales tres tienen que ser servicios prestados en el Sergas". "La incorporación efectiva de este personal no se produjo hasta el 2017", explicó el sindicato.

La Confederación Intersindical recordó que fue la única organización de la Mesa Sectorial que no firmó este acuerdo y mantuvo la huelga del 2 y 3 de noviembre de 2017 por "ser conscientes de que la propuesta era lesiva para los trabajadores".