Mariano Rajoy disfruta ya de las vacaciones de Semana Santa en su piso de Sanxenxo. El presidente del Gobierno no quiso esperar demasiado para entregarse a uno de sus habituales paseos por la playa de Silgar y ayer a primera hora de la tarde, poco tiempo después de que aterrizase en Galicia procedente de Madrid, ya de se dejó ver por el entorno del arenal en compañía de su primo Enrique Rajoy, según explicó el propio presidente del Gobierno a FARO. El mandatario se disponía a disfrutar de una caminata por el paseo marítimo y se dirigía hacia el entorno del Club Náutico de Sanxenxo, un establecimiento que visita también con asiduidad cada vez que disfruta de algunos días de asueto en la villa turística.

Rajoy permanecerá en tierras pontevedresas hasta el próximo domingo, según confirmaron fuentes de Moncloa a Europa Press. Llega a Sanxenxo para pasar este tramo final de la Semana Santa en compañía de su familia y con el objetivo de descansar aunque sin perder el pulso de la actualidad nacional que tiene su principal foco de atención en Cataluña, tras la detención el pasado domingo en Alemania del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. De hecho, estas mismas fuentes señalaron que Rajoy viajó hacia Galicia tras pasar la mañana de ayer en su despacho atento al discurrir del pleno extraordinario del Parlamento catalán en el que se aprobó una resolución reivindicando el derecho de Puigdemont a poder ser investido presidente del ejecutivo autonómico.

Durante su paseo por Sanxenxo Rajoy también indicó, en declaraciones a La Sexta, que lo que espera del devenir del conflicto catalán, "como muchísima gente" es que "se haga un gobierno cuanto antes y que haya un candidato que no tenga problemas con la Justicia, y que ese candidato esté dispuesto a cumplir la ley" para a continuación "que todos nos pongamos a hablar y a construir". Rajoy también llega a Sanxenxo justo después de que su Gobierno hubiera aprobado el martes en consejo de ministros el proyecto de Presupuestos Generales del Estado.

Ruta da Pedra e da Auga

La llegada de Rajoy a Sanxenxo coincidió con una tregua en el tiempo lluvioso que se vivió en Pontevedra ayer. Es probable que en los próximos días, el presidente del Gobierno cumpla con algunas de sus "tradiciones" cuando visita su tierra natal, como son las caminatas matinales por la Ruta da Pedra e da Auga de Ribadumia. Una cita con el deporte a la que no suele faltar cada vez que llega a Pontevedra, incluso cuando las condiciones meteorológicas no son las mejores como ya demostró en alguna anterior ocasión cuando la lluvia no impidió la visita del presidente del Gobierno a su ruta predilecta en las tierras de O Salnés.

Aunque las visitas del presidente del Gobierno a Sanxenxo y a Pontevedra son bastante habituales, Rajoy había optado en los últimos años por disfrutar de los días de vacaciones de Semana Santa en otros destinos. El más repetido últimamente había sido Doñana, con sus estancias en el Palacio de las Marismillas, en donde Felipe González estableció en 1992 la residencia de verano del presidente del Gobierno,y que han utilizado posteriormente tanto José María Aznar como Zapatero y el propio Rajoy. En esta ocasión, Sanxenxo ha ganado la batalla al palacio enclavado en el famoso parque nacional y vuelve a ser el destino vacacional elegido por el presidente del Gobierno que precisamente el pasado martes cumplía 63 años.