La aprobación de la moción presentada por Silvia Díaz, a través de la que se solicitará a la Xunta que los alrededores de la Illa de Tambo no sean la ubicación para la deposición de las extracciones del dragado, choca frontalmente con la opinión de las cofradías del fondo de la ría.

Las agrupaciones marisqueras de Raxó, Pontevedra y Lourizán entienden que Tambo sí sería buena ubicación, ya que la deposición de los lodos permitiría la regeneración de la zona y le recuperación de licencias.

Estas cofradías recuerdan que los propios técnicos de Portos explicaron en múltiples ocasiones que las medidas de seguridad iban a garantizar que el dragado resultase totalmente inocuo para la ría de Pontevedra. Sin embargo, su postura choca contra la del sector de la navaja, correspondiente a las cofradías de Portonovo y Bueu. Estas agrupaciones se sitúan contra la ubicación de Tambo.

"Opinar sobre esto es meternos en un conflicto interno del propio sector", recalcó Ángel Moldes durante el transcurso del pleno municipal en el que se debatió el texto. Por su parte, Xulio Barreiro explicó que el estudio ambiental hecho "deja mucho que desear". El edil del BNG se preguntó si el estudio no estaría mal hecho "a propósito" para evitar ejecutar el proyecto y recalcó que "habría que empezar de nuevo todo el proceso". Además, coincidió en que los lodos pueden valer como medida regenatoria, pero "primero hay que saber si están contaminados".

Por su parte, Sobral destacó que "está claro que las extracciones deben depositarse fuera de Tambo".