El Bloque Nacionalista Galego denunció públicamente esta mañana en Pontevedra la imposición por parte del Gobierno de 9 sanciones de cien euros cada una a otros tantos militantes de la formación nacionalista por su participación en las protestas que llevaron a cabo el pasado 30 diciembre en el puente de Rande durante el acto de inauguración de la ampliación de la AP-9 en este punto.

El diputado Luis Bará compareció junto a los militantes que recibieron estas sanciones y recordó que los nueve participaban en una protesta contra el "acto de provocación, burla y ofensa" que supuso aquella puesta en escena de la entrada en servicio de la ampliación. "Aquello no era un acto de inauguración", señaló Bará, dado que recordó que a día de hoy, tres meses después, siguen en marcha las obras. Por lo tanto, señaló que "de lo único que se puede hablar es de acto de inauguración de la subida de los peajes un 3,81%" este año y asegura que aquel acto que contó con la presencia del presidente del Gobierno tan solo tenía como objetivo dar apariencia de que las obras habían finalizado para justificar así ya "la aplicación de la subida del peaje" este año.

Por lo tanto, insistió en que aquella protesta del BNG tenía como objeto "protestar contra el expolio" que supone la AP-9 y las "prevendas" a su concensionaria a la que, por contra, no hay constancia de que se le haya "abierto ni un solo expediente sancionador" por los atascos que sufren sus usuarios habitualmente, según remarcó Luis Bará. Muy al contrario, el diputado nacionalista insistió en que la concesionaria disfruta de ventajas fiscales "de origen franquista" como la rebaja un 95% del IBI; una reducción del impuesto de sociedades y el ya mencionado incremento del peaje.

Para Bará, estas sanciones (que ya anuncian que recurrirán por la vía contencioso-administrativo) se enmarcan dentro de una estrategia "más amplia" del Gobierno "de persecución todo tipo de protesta y de discrepancia" a través de multas "con la ley mordaza" para crear "un ambiente de miedo y autocensura". Recordó también casos de estudiantes de Galiza Nova, un joven que fue multado por exhibir una bandera gallega en Pasarón o las condenas a tuiteros o raperos, así como sindicalistas que incluso fueron condenados a penas de prisión. Aseguran que esta "estrategia", sin embargo, no "va a amedrentar al BNG".,