Una treintena de jóvenes de cinco países se encuentran estos días en la ciudad para participar en el intercambio internacional "Building Peace Through Inclusion" (Construyendo la paz desde la inclusión), puesto en marcha por el colectivo pontevedrés Ticket2Europe. Se trata de una iniciativa subvencionada por la Comisión Europea a través del programa Erasmus + que se desarrolla desde el pasado lunes y hasta el próximo martes, 20 de marzo. Sus países de origen son Alemania, Grecia, Hungría, Turquía y la propia España.

Promover la cultura de la paz desde las nuevas generaciones, prevenir actitudes violentas hacia los inmigrantes, refugiados y solicitantes de asilo y llegar a entender los motivos por los que se vieron obligados a abandonar sus países de origen son los principales objetivos del proyecto, que, en definitiva, apela a la integración social.

La pontevedresa Ana del Valle es la directora del colectivo Ticket2Europe y una de sus fundadoras. "Lo que pretendemos es trabajar desde una perspectiva de educación informal la inclusión de refugiados en sus países, ya que cuatro de ellos los están recibiendo en gran número", explica.

Desde Pontevedra conocerán que se hace exactamente en cada país para promover esa acogida. "Conocerán, por ejemplo, qué actividades se llevan a cabo en Alemania, porque a lo mejor es interesante implementarlas en Grecia o Hungría. Es conocer las diferentes realidades a través de los participantes", tal y como asegura Del Valle.

Pero, además, tendrán contacto directo con refugiados, que hoy y mañana estarán en Pontevedra y que tomarán parte en la iniciativa, así como personas que trabajaron en campos de refugiados en Eslovenia y Marruecos, entre otros.

"No se trata tanto de experiencias vivenciales entre ellos, ya que son muy jóvenes porque tienen entre 18 y 25 años, pero sí de cómo se está viviendo esta cuestión en sus países. Es el caso de Hungría, un país pequeño que está recibiendo a muchos refugiados", señala.

Asimismo, muchos de los procedentes de Grecia viven en Lesbos, donde se encuentra miles de personas atrapadas en uno de los mayores campos de refugiados de Europa.

La mayoría de los jóvenes que pasan esta semana en Pontevedra son estudiantes, de todas las áreas, desde ciencias hasta artes.

Su estancia en la ciudad tiene como epicentro el albergue en el que se alojan en la calle Gorgullón, en las inmediaciones de la estación de tren. Allí celebran también la actividades en las que intercambian esas experiencias: desde exposiciones, charlas, conferencias y debates. Obviamente, el nivel alto de inglés es una condición "sine qua non".

Desde este punto aprovechan también para hacer algo de turismo en su tiempo libre y conocer la Boa Vila. Por lo que han visto hasta el momento, la zona monumental es lo que más les ha llamado la atención, así como el hecho de que sea una ciudad tranquila y, en el centro, mayormente peatonalizada.

"Ninguno había estado nunca en Galicia, y menos en Pontevedra. Cuando pensaban en España lo hacían en Madrid y Barcelona, pero les está sorprendiendo gratamente este", dice satisfecha Ana del Valle.