El estado de ruina que amenaza al Pazo de Lourizán fue ayer motivo de enfrentamiento en la Comisión de Cultura del Parlamento gallego entre el PSdeG y el PP, concretamente entre los diputados autonómicos pontevedreses Patricia Vilán y Jacobo Moreira.

Fueron los socialistas los que introdujeron el estado del pazo en el debate de la sesión parlamentaria a raíz de una iniciativa en la que reclamaba al gobierno gallego que ejecute los compromisos pactados por la Xunta en el convenio de cesión del inmueble firmado en el año 1991 y ratificado en el año 2000. Para el PSdeG, la Xunta "incumple la obligación" que tiene sobre el mantenimiento del histórico inmueble, así como a su aprovechamiento como centro de investigación forestal. Vilán aludió a la Lei de Patrimonio de Galicia y a la cláusula de ese convenio que establece literalmente que "las obras de conservación de la zona noble del conjunto de Lourizán corresponden a la Xunta". Denunció que el PP y el gobierno gallego "se quiere escaquear" de su obligación a tres años de finalización del convenio de cesión que ya dura desde hace 30 años. Denunció que a lo largo de estas tres décadas la Xunta "dejó al albur de los elementos al edificio histórico de aire romántico y construido en siglo XIX" de tal forma que ahora presenta "un estado lamentable" con varias zonas en las que no se puede "garantizar la seguridad estructural". Señalan que la cara sur de la cubierta se está hundiendo.

Vilán alertó de que "en cualquier momento la estructura va a caer" y que en ese caso no será responsabilidad de la propietaria, la Diputación, sino "de quien tiene la cesión de uso del parque", que es la Xunta. Por lo tanto, instó al gobierno gallego a asumir la actuación estimada por la Diputación en 14 millones de euros para rehabilitar el inmueble.

Asegura que este incumplimiento en el mantenimiento del edificio es un incumplimiento "muy grave" de la Lei de Patrimonio.

Por su parte, el diputado del PP Jacobo Moreira criticó que el PSdeG pida ahora "que la Xunta rehabilite el pazo de Lourizán cuando "desde el gobierno de la Diputación rechazó hace menos de dos años el proyecto de rehabilitación propuesto por la Xunta" y que incluía financiación de la empresa Ence para restaurar el inmueble y crear allí un centro de investigación forestal.

Ence

Ence destinaba cinco millones a recuperar el inmueble y otros cinco a proyectos de investigación. Un rechazo que el diputado popular calificó como "irresponsabilidad tremenda" por parte de la Diputación.

Jacobo Moreira añadió que esta era "una solución buena económica y técnicamente, buena en cuanto a agilización de plazos y buena para la administración pública que, en ningún caso perdía la titularidad pública del edificio".