Cómo es la formación de una persona ciega o con dificultades visuales, qué materiales didácticos específicos se emplean para este grupo de población o cómo es su código de lecto-escritura son algunos de los temas que conocerán más a fondo medio millar de alumnos de Pontevedra.

Acompañados de sus profesores, estos estudiantes de centros educativos públicos, privados y concertados participarán en la Semana de Puertas abiertas que inauguró ayer el Centro de Recursos Educativos (CRE) de la ONCE y que concluirá el próximo viernes.

Los organizadores de esta semana destacan que los participantes podrán conocer "materiales y equipos representativos del aula de tiflotecnología (ordenadores, escáneres, lectores de documentos, programas de última generación), materiales didácticos y maquetas del museo y comprobarán el funcionamiento o utilidad del material".

También se les explicara cómo se produce el material didáctico específico, por ejemplo los libros adaptados, mapas en relieve y la reproducción de láminas.

El acercamiento también incluirá que los alumnos y docentes puedan aprender unas nociones básicas del código de lecto-escritura braille "y se les mostrará la unidad de producción braille, el lugar donde se transcriben los libros en tinta a braille".

Los alumnos, que actualmente cursan Primaria, ESO o ciclos de Formación Profesional, también participarán en un taller braille en el que harán uso de 15 máquinas Perkins con papel braille.

Finalmente, también tendrán oportunidad de sumarse participarán en un taller de técnica guía, donde les enseñarán orientación y movilidad y habilidades de la vida diaria. Para estas prácticas y a fin de emular en todo lo posible las condiciones a las que se enfrenta una persona ciega utilizarán antifaces y gafas de simulación.

Las mismas fuentes indican que "alumnos y profesores serán atendidos por personal técnico especializado del centro".

Tras la recepción a cargo del centro, José Ángel Abraldes, los estudiantes inician la visita divididos en grupos reducidos a fin de que puedan participar activamente y experimentar con los materiales en los talleres, que tendrán una duración de 30 minutos cada uno.

Con esta iniciativa el CRE continúa las celebraciones vinculadas a su 75 aniversario.