Los concellos y las federaciones deportivos ya suspendieron en la jornada de ayer todas las actividades al aire libre previstas, una prohibición que se extiende a la jornada de hoy, al menos durante la mañana, cuando se mantienen los fuertes vientos y precipitaciones intensas por momentos.

Hasta las diez de la noche de ayer ya se habían acumulado en menos de 24 horas alrededor de 25 litros por metro cuadrado de lluvia en la estación meteorológica do Areeiro (Pontevedra), otros veinte en la de Cotobade y doce en Ponte Caldelas. Caldas llegaba a 21, algo más que Sanxenxo y en Campolongo se marcaban a esa hora 117 litros. Las rachas de viento más fuertes se alcanzaron hasta las diez de la noche en A Lanzada con 104 kilómetros por hora, en Caldas, por encima de los 80 kilómetros por hora, y en Sanxenxo, cerca de 70. En el observatorio de Cuntis, situado en lo alto del Monte Xesteiras, se marcó una racha máxima de 122 kilómetros por hora y llegó a unos sesenta en Campolongo.