La ANPA del colegio Isidora Riestra destacó ayer que los alumnos y trabajadores del centro tuvieron "mucha suerte".

La agrupación de progenitores señaló que el incidente "es el segundo grave que se produce en el centro" en lo que va de curso. El primero tuvo lugar a finales del trimestre pasado, cuando un niño al salir de clase tropezó y apoyó la mano en una cristalera de la planta baja. Ésta cedió y le produjo cortes en los brazos, por los que tuvo que ser operado para sacar los cristales que se le incrustaron y comprobar que no tenía ningún tendón afectado.

Tras este incidente, la dirección del centro puso en conocimiento al Concello y a la Xunta de Galicia. Por parte de la Consellería no se recibió "respuesta alguna", por lo que en febrero se volvió a solicitar una reunión con el delegado para exponerle el mal estado en que se encuentra el centro y las inversiones urgentes que necesita el colegio. "A día de hoy aun estamos esperando fecha para esa reunión", expresó.

"Este lunes nos encontramos que durante el fin de semana se ha caído el falso techo del aula de los más pequeños del colegio. Hemos vuelto a tener suerte ya que si esto pasa en horario lectivo, estaríamos hablando como mínimo de un buen número de niños heridos", añadió el ANPA.