La Xunta anunció ayer que las obras para soterrar la línea de alta tensión de Monte Porreiro, pendiente desde hace una década y una demanda histórica de los vecinos "comenzará a ser una realidad a finales del próximo mes de marzo". El anunció se efectuó después de una reunión entre el delegado territorial autonómico, José Manuel Cores Tourís y directivos de Unión Fenosa como Julio González García, jefe de Distribución en Galicia, y Juan José Coiradas, delegado en Pontevedra.

Se confirma así la última fecha apuntada por la compañía para comenzar estos trabajos. Primero se apuntó a junio pero después se adelantó a "marzo o abril", todo ello en medio de una controversia sobre la necesidad de disponer o no de licencia expresa del Concello.

Fenosa dispone desde mediados de diciembre de la autorización municipal para acometer las obras, tal y como admitió la propia compañía, pero en enero formuló un recurso administrativo contra algunas de las condiciones de ese permiso.

Si se concreta esta fecha, la línea estaría acabada antes de final de año. Se trata de enterrar algo más de 1.980 metros de canalización eléctrica desde la subestación de Mourente (en la rotonda de Montecelo) hasta la calle Reino Unido. El plan, presupuestado en 1,5 millones de euros, incluye la eliminación de nueve torretas actuales.

En la reunión de ayer también se anunció la puesta en marcha de nuevas lineas de conexión y distribución desde la subestación eléctrica del polígono de Barro-Meis.