José Manuel Moure Rey, el empresario condenado por apropiarse de gran parte del dinero que le entregaron dos familias para la construcción de unas casas de madera en Tomeza y Campo Lameiro que nunca llegó a ejecutar; regresó ayer a la Audiencia Provincial.

Lo hizo ante la petición formulada por una de las familias víctimas de este caso que solicita a la Sección Segunda de la Audiencia que adopte medidas cautelares contra esta persona después de que haya sido condenado a siete años prisión por estos hechos y pese al recurso que la defensa del acusado ha interpuesto contra esta sentencia ante el Supremo. Una petición a la que se suma la Fiscalía.