Los trabajos de renovación y mejora de la playa fluvial del río Lérez, recién comenzados por el Concello, se prolongarán alrededor de tres meses, por lo que no estarán listos para la Semana Santa, que se celebra a finales de marzo, según admitió ayer el concejal de Parques y Jardines Alberto Oubiña. Esta semana sería el primer anticipo de la temporada de baño del año si llega con buena climatología, pero al coincidir en esta ocasión tan pronto se estima que el cierre de la playa no tendrá incidencia.

El edil también asume que la arena de la playa, que en un principio se quería reaprovechar, tendrá que ser renovada en su práctica totalidad, al igual que la capa geotextil situada bajo ella y que presenta un notable deterioro casi nueve años después de la inauguración del arenal.

Las obras en marcha, con un presupuesto de unos 240.000 euros, se adjudicaron en julio pasado, pero su inicio se demoró primero para no interferir en el uso durante la época estival y después por otras circunstancias, como el parón de la construcción en diciembre, que obligaría a tener la labor paralizada varias semanas.