La Policía Local de Pontevedra realiza desde ayer y hasta el domingo 21 controles de diversos apartados de la conducción y el estado del vehículo, sumándose así a una campaña de la DGT.

Durante el primer día, llevó a cabo dos dispositivos: uno por la mañana en Domingo Fontán y otro por la tarde en el Paseo de Colón. Después de examinar 1.070 vehículos, los agentes oficializaron cuatro denuncias: una por conducir con el permiso de circulación caducado, otra por no llevar el cinturón de seguridad y las dos últimas por no haber pasado el examen de la ITV. Uno de estos dos últimos vehículos acumulaba cuatro años sin presentarse al examen de inspección.

En la campaña también se vigilará a los transportistas que "hacen uso de los GPS o albaranes mientras conducen", detalla la Policía Local. Además, incide en los comportamientos que suponen distracciones al volante, en especial por el uso del teléfono móvil ya que "en más del 60% de los accidentes de tráfico en la ciudad están presentes los despistes y en 2016 resultaron heridos como consecuencia de siniestros de circulación 149 personas, 18 de ellas graves". Se atribuyen muchos de estos casos a una inadecuada atención, de ahí que se ponga especial énfasis en el teléfono. Aunque se aclara que este tipo de vigilancia se realiza todo el año, durante esta semana se prestará especial atención a aspectos como el estado de los neumáticos, el alumbrado y la señalización de los vehículos.