La Consellería de Infraestruturas de la Xunta de Galicia avanzó ayer que las obras de remodelación en el puente de A Barca son "inminentes" y que comenzarán "en cuanto mejore el tiempo". Así lo aseguraron fuentes del gobierno autonómico, que, además, informaron de que la conselleira Ethel María Vázquez había enviado ayer mismo sendas cartas a los alcaldes de Pontevedra y Poio para recordarles que el sistema eléctrico del viaducto es una competencia municipal y que le corresponde a ambos concellos su reparación "para garantizar la seguridad de las personas usuarias y, en especial, de los viandantes".

Los vecinos de ambos municipios, unidos por el puente, la PO-531, llevan semanas manifestando su malestar por el deficiente estado de la infraestructura, dañada tras los temporales de 2016, situación que sufren desde hace un año pero que se ha agravado con el inicio del actual invierno. Al hecho de circular por una obra que carece de numerosas planchas de uralita de la cubierta se une la falta de iluminación, que dificulta el tránsito peatonal por las noches.

Los dos concellos afectados reconocieron a este periódico el pasado martes que se encuentran a la espera de que se lleven a cabo las obras en el puente, que conllevarán una nueva iluminación. Sin embargo, estas declaraciones no han gustado nada en la Xunta, que insiste en asegurar que esta cuestión corresponde a ambos gobiernos locales.

"Se trata de una vía muy transitada en la que la falta de luminosidad pone en riesgo la segurdidad vial, especialmente en el caso de los peatones", subraya la conselleira en su misiva a ambos alcaldes. Es en este punto en el que les recuerda que "es una responsabilidad de competencia municipal", una cuestión sobre la que ambas partes no parecen ponerse de acuerdo.

"Desde esta consellería consideramos que estas reparaciones deben realizarse de forma inmediata, independientemente de la intervención que la Xunta de Galicia tiene planificada para los próximos meses, que incluye una rehabilitación estructural del puente de A Barca", asegura Ethel Vázquez.

En estre sentido, fuentes de la consellería recalcaron que estas obras se iniciarán "cuanto antes" y que ya dependen solamente de un cambio en la climatología.

"La Xunta de Galicia ha trabajado duro en el último año realizando los trabajos de campo necesarios, en los que se realizaron incluso inspecciones con aviones no tripulados, y redactando el proyecto constructivo preciso que permitirá la contratación de las obras de forma inminente" , asegura Ethel Vázquez.

El documento técnico relativo a esta obra, cuyo importe asciende a 1,22 millones de euros, se engloba en dos grupos: labores de rehabilitación y conservación de la estructura propia del puente para prolongar su vida útil y sustituticón completa de la marquesina existente por una totalmente nueva.

"Discusión eterna"

Si la Xunta tiene muy claro que la iluminación es una competencia de los concellos de Pontevedra y Poio, desde el de la capital no lo ven del mismo modo.

El concelleiro de Ordenación del Territorio e Infraestruturas, César Mosquera, aseguraba ayer en un desayuno informativo con los periodistas que se trata "de una discusión eterna".

"El puente es de la Xunta y ahí hay la discusión eterna sobre de quién es la iluminación. Yo nunca vi un papel que pusiese que en el puente de A Barca la iluminación correspondiese a A o a B, es más, estoy seguro de que no existe", subrayó.

En este sentido, informó de que lo único que hay es "un acuerdo tácito" de que la iluminación debe costearla la administración local correspondiente, "pero de ahí a que si hay que cambiarla lo tenga que asumir el Concello...", puso en duda.

"Esta obra, si mal no recuerdo, fue hecha en el año 1993 o 1994 por la COTPV y es quien la sostiene. Si el titular de la vía es quien es, el mantenimiento de la vía es suyo, salvo que haya algún acuerdo expreso en sentido contrario, y, que yo sepa, no lo hay", resumió.

"Lo que tiene que pasar es que se haga la obra cuanto antes", instó a la Xunta.

Mosquera reconoció ayer que "más disgustados de lo que podemos estar nosotros no está nadie". "Pero tenemos la situación que tenemos, igual que pasa en muchas ocasiones con algo afectado por Costas", se lamentó.

De cualquier forma, opinó que cualquier cambio en la iluminación a estas alturas no tendría sentido desde el momento en que está pendiente una gran reforma en el puente por parte de la Xunta.

"Nosotros hicimos lo que pudimos y, de hecho, si se va a arreglar el puente es porque nosotros, como Concello de Pontevedra, pusimos el grito en el cielo", recordó.